Ciudad de México, México.– En 2020, aún con la emergencia sanitaria por COVID-19, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) logró otorgar tratamiento oportuno a 356 pacientes con tuberculosis pulmonar, informó la responsable del Programa de Micobacteriosis para el Control de Tuberculosis y Lepra de la Dirección Normativa de Salud, Margarita Ortega Lucero.
La especialista aseguró que, por instrucciones del Director General, Luis Antonio Ramírez Pineda, el ISSSTE reforzó la estrategia para prevenir y erradicar la tuberculosis, considerada una de las enfermedades infecciosas más letales del planeta, por la que cada día casi 4 mil personas pierden la vida, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Añadió que el año pasado, el Instituto registró una tasa de prevalencia de 4.51 por 100 mil derechohabientes de este padecimiento. Además, identificó que 5.5 por ciento del total de pacientes diagnosticados presentaron farmacorresistencia, por lo que les fue reestructurado el tratamiento.
La especialista en salud pública informó que una clave para el control de la tuberculosis pulmonar, la variante de tipo contagioso y de mayor prevalencia con el 80 por ciento de casos, es la aplicación de la estrategia de vigilancia denominada Tratamiento Acotado Estrictamente Supervisado (TAES), recomendado por la OMS.
Entre otras ventajas, el TAES garantiza la puntual toma de los medicamentos, ya que los pacientes diagnosticados acuden diariamente a sus unidades médicas para que se les proporcione cada 24 horas la dosis de su tratamiento farmacológico y la ingieran en presencia de su médico tratante, esto durante seis meses.
“Los pacientes con diagnóstico de tuberculosis pulmonar redujeron su asistencia a las unidades médicas por temor al contagio, sin embargo, bajo la directriz de la Secretaría de Salud, el ISSSTE implementó una estrategia emergente en busca de que los pacientes no interrumpieran sus tratamientos”, acotó.
Por ello, dijo, se les proporcionó la dotación mensual de los medicamentos en sus unidades médicas, en espacios especiales con todas las precauciones y medidas preventivas para evitar riesgos de contraer COVID-19.
“De manera complementaria implementamos un sistema de monitoreo y control de los pacientes mediante video llamadas y mensajes por WhatsApp y se dio continuidad al seguimiento de cadenas de contagio, detección de casos probables y confirmación por estudios de laboratorio”, puntualizó
La bacteria de la tuberculosis tiene mayor riesgo de propagarse en ambientes cerrados y en personas con contacto cercano por periodos largos de tiempo con enfermos, factores que se incrementaron con el confinamiento en casa debido a la pandemia COVID-19, por lo que la meta del ISSSTE es detectar a todos los casos probables de presentar la enfermedad mediante la búsqueda intencionada de pacientes y la atención preventiva de las cadenas de contagio.
El Instituto se suma al llamado urgente de la OMS y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) bajo la consigna de que “El tiempo corre”, a dar continuidad e intensificar la estrecha vigilancia epidemiológica y control de esta enfermedad, que debido a la pandemia redujo su impacto a nivel global en 2020.