Ciudad de México, México.– En México y el mundo tenemos cada vez más sequías y tormentas tropicales intensas y recurrentes, frentes fríos prolongados y otros fenómenos meteorológicos que influyen de forma decisiva en la agricultura, por ello es indispensable estrechar la coordinación entre las instituciones que realizan monitoreo meteorológico y predicciones climáticas asociadas a la producción del campo, afirmó el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura.
Propiciar esta coordinación es prioritario, pues el país debe aprovechar a los expertos y técnicos con los que se cuenta, con formación y desempeño de alto nivel y de primer mundo, refirió al presidir la conferencia 21 del ciclo “Autosuficiencia alimentaria e innovaciones tecnológicas con prácticas sustentables”.
En la conferencia “Expectativas agroclimáticas 2021”, dijo que “enfrentamos una agricultura crecientemente compleja, con mayores incertidumbres climáticas y de mercados e influida por fenómenos geopolíticos globales, así como por una mayor conciencia de los consumidores respecto de la calidad de la alimentación, por lo que es imprescindible involucrarse en conocimientos como el comportamiento y las predicciones del clima para apoyar, de la mejor manera, a los productores”.
El responsable del Laboratorio Nacional de Modelaje y Sensores Remotos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), Víctor Manuel Rodríguez, refirió que la sequía es el tema que predomina en la urgencia del conocimiento del clima, ya que el desabasto de agua y sus efectos en la agricultura requieren de modelos de pronósticos específicos y oportunos.
Indicó que el cambio climático afecta al sector primario en México y aspectos como el incremento en la temperatura del aire; la frecuencia, distribución e intensidad de eventos extremos de lluvia; cambios en el patrón y disponibilidad de agua, y perturbaciones en los ecosistemas, son indicadores que ayudan en la evaluación y modelaje para conocer los fenómenos que se presentan y tomar decisiones a tiempo.
El Niño/La Niña y pronósticos de lluvias
El gerente de Ciencias de la Atmósfera de Agroasemex, Arturo Pérez Sesma, habló del fenómeno El Niño/La Niña. Se centró en la versión de este fenómeno que se presenta en la región del Ecuador, que es el que influye sobre México; dijo que tiene una recurrencia de tres a siete años.
Comentó que, influido por El Niño/La Niña, que alteran la circulación de los vientos en la atmósfera baja, actualmente la República Mexicana enfrenta un clima seco, con excepción de la península de Yucatán y un poco Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco, que tienen lluvias arriba de lo normal.
Por ahora, agregó, La Niña está presente y se prevé que se mantenga hasta mayo de este año, por lo que la escasez de lluvia podría prevalecer hasta abril y que ocurra un retraso en el inicio de la temporada de chubascos en Baja California Sur, Coahuila, gran parte de Veracruz, Tabasco, Campeche y norte de Oaxaca y Chiapas principalmente.
La directora de Soluciones Geoespaciales del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), Elia Guerrero Peña, señaló que las condiciones de precipitación, temperatura, suelo y humedad, entre otros, son cambiantes por el factor calentamiento global y propicia modificaciones en las fechas de siembra las regiones del país. “No son las mismas de hace 30 años ni las de hace cinco años”, añadió.
Adelantó que el SIAP desarrolla la herramienta Aptitud Agroclimática, cuyo objetivo será definir cuáles son las áreas y las mejores fechas para sembrar.
Adaptado a México y, en particular, al trabajo del SIAP, “el concepto internacional Aptitud Agroclimática representa espaciar la potencialidad de los cultivos del campo, asimilando las diferentes etapas fenológicas junto con sus requerimientos climáticos y edafológicos”, subrayó.
El coordinador general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua, Jorge Zavala Hidalgo, habló de los diferentes métodos de pronóstico climático, incluido el de “años análogos”, que permite proyectar condiciones a partir de años previos con condiciones similares de temperatura marítima y terrestre.
Presentó una previsión estacional de precipitación y temperaturas máximas y mínimas para marzo y abril de este año en México.
En cuanto a precipitaciones, señaló que en marzo se espera que llueva 3.8 por ciento por abajo de la media nacional. Para abril, se prevé sea 22 por ciento por debajo de la media nacional, con condiciones por debajo de lo normal previstas para el norte, noreste, regiones de la vertiente central, sur y península de Yucatán. Y se prevé una precipitación por arriba del promedio en Tabasco, Campeche y regiones al norte de Oaxaca y norte y sur de Chiapas.
Dijo que marzo se pronostica con temperaturas mínimas ligeramente por debajo del promedio en regiones del oriente y occidente, y para abril 2021 se esperan temperaturas mínimas por arriba del promedio en regiones de la Meseta Central, sur y norte de México.