Considerado por una gran mayoría de analistas y politólogos como la promesa del nuevo conservadurismo mexicano, el queretano Ricardo Anaya (36 años de edad), dio el viernes pasado un nuevo y decisivo paso para acabar con las querellas y confrontaciones internas en el PAN, y preparar a este partido para ser una opción real de poder en el 2018.
Y es que el fin de semana llegó a la 18 Asamblea Nacional Extraordinaria de Acción Nacional casi del brazo del expresidente Felipe Calderón para luego encontrarse en el estrado con su padrino político, el ahora diputado Gustavo Madero.
Juntos pero no revueltos, todos ellos hablaron de unidad y de futuro. Y permitieron que en enmarcados por una imagen impensada hasta ese viernes, con Calderón de un lado y Madero del otro, Anaya pudiera hablar de poder ganar no sólo las siguientes elecciones –las de 2016, 2017 y 2018-, sino de preparar a su partido para eliminar los vicios del PRI y del estatismo del recién nombrado presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador.
“Por el bien de México ni más priísmo de los viejos vicios ni el estatismo depredador de López Obrador”, afirmó.
Al hacer este pronunciamiento el joven queretano tenía detrás a Margarita Zavala, aspirante abierta a la candidatura del PAN a la Presidencia de la República en 2018.
Propiciado por él este reencuentro de la expareja presidencial con las estructuras de poder dentro del PAN, Anaya deja en claro que amplía la baraja de aspirantes blanquiazules a Los Pinos que hasta el viernes sólo tenía como apuntados al gobernador de Puebla, el expriísta Rafael Moreno Valle, a Gustavo Madero y a él mismo.
Con este paso Anaya no sólo avanza a dar fin a los conflictos internos –entre maderistas y calderonistas-, que han disminuido las posibilidades del PAN, sino que renueva reencauza el juego interno.
La unidad, apuntó, debe dejar atrás la simulación, indicó.
“La división panista es la mejor receta para la derrota… necesitamos unidad en Acción Nacional. Como dice uno de los versos del gaucho Martín Fierro: ‘Tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean, los devoran los de afuera”, entonó.
El encuentro finsemanal que fue el pretexto para todo lo descrito antes, fue para avanzar en la creación de la Comisión de Anticorrupción que lidera el ex líder dirigente nacional del PAN y exsecretario particular de Felipe Calderón, Felipe Bravo Mena.
NO SE VAYAN
En este contexto, el ex presidente Felipe Calderón, quien había amenazado no sólo con irse del PAN sino impulsar la creación de otro partido, dijo estar decidido a continuar no sólo dentro del PAN sino a participar dentro de las acciones y decisiones pendientes de resolver al Interior de este partido.
Y convocó a los inconformes y decepcionados a quedarse como él lo ha decidido.
“Como cualquier ciudadano tengo mis opciones políticas y una opción política por la que he decidido es el Partido Acción Nacional. Yo llamaría a muchos panistas que están decepcionados, que están agraviados a que no renuncien”, exhortó.
De entrada y ya reinstalado en la cúpula panista, Calderón –quien ha ocupado decenas de cargos internos hasta la misma presidencia del PAN-, dijo que es necesario depurar el padrón interno.
Y es necesario revisarlo y limpiarlo, dijo, porque “está tocado, está alterado, está manipulado, lo que impide un ejercicio democrático como merece Acción Nacional”.
Ya metido en esta posición, el expresidente exigió crear condiciones equitativas de competencia interna, tanto para ocupar las dirigencias del partido como para ser candidatos, a fin de reclutar y postular a los mejores ciudadanos.
En cuanto a la propuesta del presidente del PRI, el sonorense Manlio Fabio Beltrones de ir a una nueva Reforma Electoral, Calderón consideró que es necesaria.
Indicó que Beltrones tiene razón y que hay que ajustar las normas electorales a los tiempos de la sociedad y los partidos. Indicó que asimismo es procedente la propuesta de Ricardo Anaya, de ir a esa Reforma siempre que se acepte la propuesta de la segunda vuelta electoral.
“Hay dos posturas, una del propio dirigente del PRI, Manlio Fabio Beltrones, que estipula que no se abuse de los tiempos oficiales, por ejemplo Andrés Manuel López Obrador, creo que ha llegado ya o está por llegar al millón de spots personales, lo cual coloca una contienda totalmente inequitativa en favor de López Obrador. Y creo que esto debe aplicarse al dirigente de MORENA o al dirigente del PAN, del PRI.
“Y segundo: también he visto la postura de Ricardo Anaya, que lo apoyo totalmente y sé que en México es fundamental crear una segunda vuelta. ¿Por qué razón? Porque el ciudadano está llegando a un momento que le genera una gran frustración la vida democrática. No sé por qué la ha evitado el PRI, me parece lógico que el PRI le ha temido a la segunda vuelta porque sabe que es un partido rechazado”, aseveró.
Reiteró que está convencido de que su esposa Margarita Zavala pudiera ser la mejor candidata presidencial por el PAN en el 2018, porque, aseguró, es la mejor posicionada y la de mayores posibilidades para el partido
“La verdad es que Margarita es ahora, su margen político es el mejor posicionado en el PAN para ese cargo, es una candidatura muy fresca, tiene una percepción muy positiva en la sociedad, es una persona honesta, eficiente y capaz”, indicó.
POR ACLAMACIÓN
Ese mismo viernes y sin necesitar entrar en votación alguna ya que fue postulado como candidato único, Andrés Manuel López Obrador fue designado Presidente del CEN de su partido Morena para el periodo 2015-2018.
Desde ahí, y con un equipo de incondicionales, el tabasqueño definirá sin restricciones ni opiniones más allá que la suya, la estrategia electoral para 2016 y 2017 y así avanzar en su propia postulación para los comicios presidenciales de 2018.
Bajo el principio de que, “la tercera es la vencida” y con los sondeos que lo ubican como el favorito a 3 años de esa contienda, López Obrador propuso y le fue también de inmediato concedida la aprobación de:
Gabriel García Hernández, para la Secretaría de Organización ( antes se desempeñaba como secretario Técnico y Estructura Electoral),
Alejandro Esquer, para la Secretaría de Finanzas (era secretario particular de AMLO y su brazo derecho en las elecciones de 2006 y 2012).
César Yáñez, en Comunicación.
Los mil 958 congresistas asistentes y quienes lo eligieron por aclamación –lo que eso signifique-, designaron también a 200 integrantes del Consejo Nacional, órgano que encabezará Bertha Luján.
Entre los 200 consejeros nacionales quedan César Yáñez, Valentina Batres Guadarrama, Clara Brugada, Héctor Vasconcelos, Luisa María Alcalde Luján, Francisco Ignacio Taibo, Emilio Ulloa, Alejandro Esquer, Claudia Sheinbaum, entre otros, todos ellos del primer círculo de AMLO.
Todos los cargos electos estarán vigentes hasta noviembre de 2018.
