TRAS LA PUERTA DEL PODER
Por Roberto Vizcaíno
Con la sensibilidad probada de que es uno de los pocos políticos con sentido de Estado en México, Ricardo Monreal le entra directo a uno de los temas más repudiados por la sociedad, el de los abusos de religiosos a niños y niñas, con una propuesta penal radical: que no haya prescripción de esos delitos y que en sacerdotes y jerarquías superiores, se dupliquen las penas.
El líder de la mayoría de Morena en el Senado y presidente de la Junta de Coordinación Política considera que su propuesta responde al por demás escandaloso incremento de impunidad por delitos sexuales cometidos por ministros de culto.
“México no es la excepción y hay que establecer la imprescriptibilidad e incrementar al doble las penas a religiosos que cometan lenocinio y corrupción contra menores”, insistió.
Por ello presentó ante el Pleno de la Comisión Permanente una iniciativa para reformar con ese fin el Código Penal Federal.
“… la propia Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), admite que es necesario robustecer la legislación penal para garantizar una verdadera protección a las víctimas de estos reprochables actos”, indica.
Recordó que en días anteriores, Alfonso Miranda Guardiola, secretario de la CEM, reveló que al menos 101 sacerdotes han sido sometidos a procesos por haber cometido delitos sexuales.
Child Rights International Network indicó por su parte que América Latina tiene el mayor número de querellas o denuncias, casi mil, por abusos sexuales, sobre todo en Argentina, México, Chile y Colombia.
“Es tiempo de romper con la impunidad que por años ha revestido los miles de casos que hoy siguen en el silencio, y de fortalecer la legislación penal para proteger el libre desarrollo de la personalidad y el libre desarrollo psicosexual, especialmente de la niñez y la adolescencia mexicanas”, apunta en su iniciativa.
A FAVOR DE LOS TRABAJADORES
En otro orden, Monreal se congratuló por la publicación en el Diario Oficial de la ratificación del Convenio 189 de la OIT.
Con eso se buscará, dijo, desterrar del país el abuso y la violencia, y garantizar un trato y salarios justos a las y los trabajadores, así como la no discriminación por razones de género.
“Esto obliga a proteger y garantizar los derechos humanos de quienes trabajan en el hogar”, o domésticos.
La entrada en vigor de este Derecho, obliga al Estado mexicano a instrumentar medidas que garanticen la libertad de asociación sindical y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva.
Al parejo se eliminan todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio; la abolición efectiva del trabajo infantil; y la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación.
Monreal indicó que en México existen más de 2.2 millones de personas que prestan sus servicios en el hogar, de las cuales el 90 por ciento son mujeres, y en su gran mayoría no gozan de seguridad social o de la protección de un mecanismo afín.
“Estamos en el camino de recuperar el respeto a su dignidad”, apuntó.
¿SE LE AGOTÓ EL TIEMPO A MUÑOZ LEDO EN MORENA?
Abierto crítico de la política de represión que ejerce a través de la Guardia Nacional el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en contra de los migrantes centroamericanos, Porfirio Muñoz Ledo, vicepresidente de la Comisión Permanente fue impedido por sus propios compañeros diputados y senadores de Morena a hablar ayer en tribuna donde pretendía exhibir un video donde se ve a los agentes golpear y arremeter, detener y someter a los migrantes que se localizan en la frontera de México con Guatemala.
Apoyado por senadores y diputados del PAN, PRI, PRD y MC, Muñoz Ledo buscaba así exigir la intervención de Rosario Piedra, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en este tema.
Este fue apenas uno de los tensos momentos que vivió la presentación del primer informe de Piedra Ibarra ante el Congreso.
Cuando Muñoz Ledo dijo a Mónica Fernández, presidenta del Senado en funciones de presidenta de la Comisión Permanente que él había hablado antes con Piedra del tema y esta aceptaba escucharlo, Fernández le respondió:
“… la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos no manda en esta Comisión Permanente, aquí se deciden las cosas por el pleno de la comisión Permanente y han votado porque no se rompa el reglamento que se aprobó”, es decir por qué Muñoz Ledo no hablara desde la tribuna.
Ante los reclamos de diputados y senadores del PAN, PRI, PRD y MC de qué se le dejara hablar, Fernández acotó:
“No hay ninguna censura, ustedes acordaron un reglamento, ustedes acordaron los tiempos, ustedes acordaron todas las participaciones por unanimidad, es mi deber poner a consideración de este pleno si respetan el reglamento o no, ha votado la mayoría por respetar este reglamento que fue aprobado, tenemos que continuar con sesión”,
Y Muñoz Ledo no pudo intervenir.
Luego en entrevista, Muñoz Ledo confesó que esta censura le obligará a repensar prácticamente si se queda o no en Morena.
“… no sé de dónde llegó la instrucción; fue muy doloroso ver a mis amigos (de Morena) votando tan agresivamente. Voy a pensar cuáles van a ser las relaciones a futuro que tengo… Lo que hubo aquí fue miedo a la verdad, lo que hubo aquí fue clausura del pensamiento, lo que hubo aquí fue ley cerrazón y miedo a la verdad”, indicó.
ALEJANDRO MORENO
LA COPPPAL DEBE CUIDAR Y PROTEGER LAS INSTITUCIONES
Líder de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe, la COPPPAL, Alejandro Moreno buscará relanzar a los partidos políticos como el mecanismo más poderoso para la solución de los grandes problemas del continente y para crear un amplio frente democrático.
Promotor de una amplia solución política en un continente con una sociedad en profunda rebeldía contra sus políticos, Moreno, presidente del PRI, afirma:
“Queremos ser la voz en el debate de los temas estratégicos, pero también la que tenga la capacidad de conjuntar expresiones que históricamente han carecido de ella”.
Al tomar la protesta a los Vicepresidentes de la Región Norteamérica de la COPPPAL -una organización creada y liderada por Gustavo Carvajal hace 40 años, y que logró influir en los grandes avances democráticos en América Latina de aquel momento-, Alejandro Moreno convocó a los líderes de los cerca de 70 partidos políticos de la región pertenecientes a esta organización, a respaldar, cuidar, proteger y defender las instituciones, que brindan mejores oportunidades a los pueblos de la región, y contribuyeron a tener hoy una democracia participativa y representativa, para alcanzar un objetivo común, que es construir un mejor futuro para México y el Continente.
En su oportunidad, el sudcaliforniano José Alberto Aguilar Iñárritu, vicepresidente Coordinador de la Región Norteamérica de la COPPPAL, y exsecretario Técnico de la Reforma del Estado, pidió a los dirigentes políticos regionales reconocer que los partidos están obligados a pensar y actuar en redes y no en masas.
“América Latina y el Caribe viven un final de paradigmas, que posiblemente exprese la culminación de una época… vivimos momentos donde las contradicciones estallan y el conflicto pareciera precipitarse a su mayor profundización: con expresiones graves en una explosiva migración, un narcotráfico irrefrenable y un consumo desbocado de drogas, inmerso todo en una profunda desigualdad social como ominosa es a su vez la concentración de la riqueza adosado todo por la corrupción y la colonización oligárquica de la vida pública”, enumeró.
En este contexto la COPPPAL, dijo, tiene mucho que decir y que hacer.