Ciudad de México, México.– La Cámara de Diputados aprobó, durante el primer periodo ordinario del segundo año de ejercicio de la LXIV Legislatura, dos reformas en materia del cuidado del medio ambiente. La primera, otorga estímulos fiscales a mujeres comprometidas con la preservación y restauración del equilibrio ecológico, y brindar herramientas que fortalezcan su participación en temas medioambientales.
La segunda, garantiza que toda persona tenga derecho a un medio ambiente sano y propicia el desarrollo sustentable al prevenir, generar y valorizar la gestión integral de residuos peligrosos, sólidos urbanos, y poner remedio en sitios con alto índice de contaminación.
En relación con la primera, se modifica el artículo 21 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, para garantizar la igualdad entre géneros y empodera a mujeres y niñas, al promover una mayor equidad social con perspectiva intercultural en la distribución de costos y beneficios asociados a la política ambiental.
Se cumple, además, con los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible al adoptar medidas urgentes que combaten el cambio climático y sus efectos, restablecen y promueven el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, gestionan los bosques de forma sostenible, luchan contra la desertificación, detienen e invierten la degradación de las tierras y ponen freno a la pérdida de la diversidad biológica.
Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos
Los diputados reformaron los artículos 10, 97, 9 y 96 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos con el fin de transformar la basura en energía, para lo cual las entidades federativas en coordinación con los municipios fomentarán el aprovechamiento de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), y manejo especial en procesos de valorización.
Asimismo, promoverán, con la participación de inversionistas y representantes de sectores sociales, la creación de infraestructura para manejo integral de los RSU y residuos peligrosos.
Planteará también en qué casos se puede permitir la formación de biogás para su aprovechamiento, así como condiciones y especificaciones que deben cumplir los sitios de disposición final y los residuos sólidos urbanos para su aprovechamiento y valorización.
El propósito es promover la reducción de la generación y gestión integral de los RSU para proteger la salud, prevenir y controlar la contaminación ambiental producida por su manejo.