Ciudad de México, México.— En la jurisdicción de la alcaldía de Iztapalapa, a cargo de Clara Brugada, la delincuencia opera a placer sin que las policías preventiva y de investigación hagan nada. Uno de los puntos negros en esa demarcación, en donde supuestamente también hay presencia de elementos militares de la Guardia Nacional, es la estación y paradero terminal del Metrobús Tepalcates.
Los delincuentes, al parecer, llevan a cabo los atracos con portación de armas de fuego y blancas durante todo el día, sin que ninguna autoridad se entere, y mucho menos esos robos queden en la estadística oficial.
Los vecinos de la zona se quejaron de la falta de respuesta de las autoridades para frenar a toda esa bola de delincuentes que viven en las unidades habitacionales y campamentos que se encuentran en esa zona.
Lo mismo atracan sobre la calzada Ignacio Zaragoza que en el transbordo entre la línea “A” del Metro y la estación terminal del Metrobús, y la exposición de la ciudadanía, por ese tipo de delincuentes, ha crecido y el riesgo latente de ser lesionado o perder la vida. Mientras ni la alcaldesa Brugada ni la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum hace nada con los elementos policiacos que cuentan para proteger a la ciudadanía.