La decisión de nombrar a Renato Sales Heredia en sustitución de Rubido fue la más atinada, tanto si se considera el perfil del primero como el de otros personajes cuyos nombres se barajaron y que no representaban sino más del continuismo acomodaticio.
Renato Sales es un servidor público eficaz y honesto, que se ganó el cargo por su desempeño. En enero de 2014 fue nombrado Coordinador Nacional Anti-Secuestro en virtud del disparo de este delito en 2013. Gracias a la labor de Sales 2015 podría concluir con un 24% menos secuestros de los que había 3 años atrás.
Los principales retos que enfrenta el nuevo Comisionado Nacional de Seguridadson:
1) Cumplir la meta que el Presidente Enrique Peña se fijó cuando aún era candidato presidencial de reducir en un 50% la incidencia de homicidio doloso, secuestro y extorsión, para cual es indispensable que las autoridades locales asuman un compromiso equivalente en el marco del Sistema Nacional de Seguridad Pública. El mismo debe extenderse a otros delitos y debería considerar la cifra oculta y no sólo las cifras oficiales.
2) Lograr un acuerdo similar de los integrantes del Sistema para abatir la impunidad y acabar con el rezago en la ejecución de cientos de miles de órdenes de aprehensión. Esto haría una contribución decisiva a la baja del delito.
3) Erradicar a las milicias privadas de los grupos criminales y a su expolio sobre la población particularmente en los estados de Tamaulipas, Guerrero, Jalisco, Veracruz, México y Quintana Roo.
4) Concretar la reforma de las policías locales de tal suerte que antes de que concluya la presente administración las fuerzas armadas retornen a sus actividades ordinarias.
5) Depurar de toda la nefasta herencia de Genaro García Luna a todos los organismos que dependen de la Comisión Nacional de Seguridad.
Por el bien de todos, deseamos a Renato Sales el mayor de los éxitos.