Ciudad de México, México.— En México, se venden entre el 30 y 35 por ciento productos a base de fórmulas lácteas a menor costo con publicidad engañosa con lo cual desplazan “el consumo de la leche natural sin que el consumidor sea consciente de ello”, aseguró el presidente de la Comisión de Ganadería, Eduardo Ron Ramos.
Por eso, impulsa una iniciativa para que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) pueda proceder contra las empresas lácteas que incumplan en su contenido con publicidad engañosa, a fin de proteger al sector productor y a los consumidores.
Indicó que la propuesta plantea que la Profeco no solamente tome medidas precautorias, sino que pueda actuar contra la empresa y el producto que incumpla su etiquetado, “pues no todos los productos lácteos están hechos de leche”.
“El objetivo de la presente iniciativa es contribuir en la construcción de las condiciones equitativas para el consumo de la leche y los productos lácteos, generando conciencia en el consumidor del producto que va a adquirir y por otro, el compromiso de las empresas de ofrecer sus productos sin la práctica de la publicidad engañosa”, comentó.
Ron Ramos señaló que actualmente México es el noveno productor de leche a nivel mundial y ocupa el quinto lugar en importación de lácteos, sin embargo, “esa alta calidad de producción no es demandada en el mercado interno, pese a que el 11 por ciento del gasto en los hogares mexicanos está destinado al gasto en leche y derivados”.
Refirió que el Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche informó que, desde 1994 a la fecha, las importaciones de leche y productos lácteos se han incrementado.
“Lamentablemente las fórmulas lácteas además de no contar con nutrientes suficientes, son vendidas como leche genuina, esto afecta al sector lechero quienes enfrentan una competencia desleal”, añadió.
Ron Ramos aseveró que mediante la publicidad engañosa se ofertan de 30 a 35 por ciento de los productos en el mercado hechos a base de fórmulas lácteas a menor costo, las cuales desplazan “el consumo de la leche natural sin que el consumidor sea consciente de ello”.
“Con esa medida se busca dejar las bases jurídicas para un cambio que permita atender el problema donde el consumidor es el más afectado y el histórico deterioro del sector lechero”, finalizó.
