Ciudad de México, México.— Las rutas plebiscitarias pueden conducir a la “democracia de la apariencia”, afirmó el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, quien, opinó que a la ciudadanía se debe de empoderar a la ciudadanía, pero sin perder la democracia ni el Estado Constitucional de Derecho.
Al clausurar las “Mesas de diálogo México-Suiza. Democracia directa y participación ciudadana: experiencias y reflexiones compartidas”
La construcción de la democracia implica la elaboración de una serie de reglas que permiten distinguir un sistema democrático, ya que, advirtió, las rutas plebiscitarias pueden conducir a la “democracia de la apariencia”.
La pluralidad distingue a las sociedades modernas y a la democracia, puntualizó, por lo que “experiencias plebiscitarias recientes terminan generando la apariencia de que, por el involucramiento de las y los ciudadanos, son muy democráticas, cuando en realidad, nos conducen a una democracia de la apariencia”, señaló.
Ante el Director de Cooperación Internacional de la Swiss Democracy Foundation y Copresidente del Global Forum on Modern Direct Democracy, Bruno Kaufmann; del Director del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Pedro Salazar; del Embajador de Suiza en México, Eric Mayoraz; del Director del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), Sergio López Ayllón, estudiantes y académicos, el Presidente del INE subrayó que en la actualidad no hay regímenes democráticos que no sean una democracia representativa.
Explicó que, en el contexto de debate de las reglas del juego democrático, las Mesas de Diálogo permiten escuchar a Suiza, país que tiene una larga experiencia de asimilar, modular y poner en práctica los mecanismos de democracia directa.
Destacó los puntos indispensables de la democracia directa: una amplia discusión pública en el parlamento o en la plaza; el involucramiento activo de la ciudadanía con acceso a la información; la tendencia al compromiso para evitar caer en un régimen autoritario o “en la tiranía de la mayoría”; condiciones de organización que garanticen imparcialidad, neutralidad, transparencia y equidad; acceso a la información y a los medios de comunicación, así como la constitucionalidad de los temas que se someten a consulta.
En el aula Guillermo Floris Margadant del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Córdova Vianello precisó que los ejercicios de democracia directa deben fortalecer la democracia representativa. “No son exportables y cada nación debe encontrar la mejor forma de estimular la participación de las y los ciudadanos en los asuntos públicos”.
Consideró que se deben discutir todas las implicaciones de la democracia directa, pero evitar el abuso de ella, pues “en lugar de contribuir a la pluralidad del debate democrático, se provocaría una simplificación artificial de la conversación pública y de la convivencia en clave democrática, porque no todo, en una democracia, puede ser sometido a un mecanismo plebiscitario, a un mecanismo de democracia directa”.
El empoderamiento de la ciudadanía preserva a la democracia
Previamente, durante la inauguración, la Consejera Claudia Zavala hizo votos porque el encuentro sirva para explorar caminos hacia dónde dirigir la democracia mexicana “siempre teniendo presente que el empoderamiento de las y los ciudadanos, es la clave para preservar a la política y a la democracia, de sus vicios y de sus errores”.
Consideró que las Mesas de Diálogo serán fructíferas, sobre todo cuando en el país parece abrirse una tendencia a la celebración de diversos ejercicios de democracia participativa, “qué mejor que conocer de la democracia suiza con 200 años de una experiencia de democracia directa”.
El director de Cooperación Internacional de la Swiss Democracy Foundation y Copresidente del Global Forum on Modern Direct Democracy, Bruno Kaufmann, dio una conferencia magistral sobre la experiencia de Suiza y señaló que la democracia directa moderna es más que un gobierno representativo. Es un aparato para representar genuinamente a la democracia.
“La democracia no se sirve en charola de plata”, dijo y alentó a ver estas cuestiones de manera seria y no tomar atajos, para no caer en regresiones. “La democracia está en proceso y no queremos tener menos, queremos tener más. Hay mucho trabajo por hacer, nunca antes el mundo y, sobre todo México, han estado tan cerca de tener esta forma de democracia”.
En las mesas, participaron la presidenta de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, María Amparo Casar; los académico de El Colegio de México, Jean François Prud´homme y del CIDE, Guillermo Cejudo; Eduardo Bohórquez, Director Ejecutivo de Transparencia Mexicana; quienes coincidieron en que las instituciones electorales en México funcionan para garantizar el derecho de participación de la ciudadanía, pero hay mucho por avanzar para ampliar la participación tanto a través de la democracia participativa como por la democracia directa.
En la mesa “La experiencia de México. Lecciones y perspectivas del diseño y ejercicio de mecanismos de democracia directa”, moderada por el Jefe de Misión Adjunto de la Embajada Suiza en México, Léo Trembley, participaron el consejero del Instituto Electoral de la Ciudad de México, Yuri Beltrán; el Director Ejecutivo de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez; el director del IIJ, Pedro Salazar y la profesora Guadalupe Salmorán.