Ciudad de México, México.– Con el objetivo de reconocer “en su justo valor” la medicina tradicional mexicana y el Lote de los Constituyentes de 1917, la diputada federal Cristiana Gaytán Hernández, presentó dos puntos de acuerdo.
El primero consiste en exhortar a los titulares de la Secretaría de Cultura y de la Secretaría de Salud a hacer pública la información sobre el estado que guardan sus respectivos programas de fomento a la Medicina Tradicional mexicana, así como los resultados de las acciones que estén implementando y a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que realicen las acciones necesarias a fin de que sea inscrita y reconocida como Patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
“En la UNESCO hay un plan de trabajo 2014- 2023 donde busca que los pueblos reconozcamos, impulsemos, valoremos y sobre todo apoyemos esta medicina tradicional”, señaló la legisladora por el PRD.
Gaytán Hernández indicó que la medicina tradicional es reconocida como un recurso fundamental para la salud de millones de seres humanos, un componente esencial del patrimonio tangible e intangible de las culturas del mundo, un acervo de información, recursos y prácticas para el desarrollo y el bienestar, y un factor de identidad de numerosos pueblos del planeta; además, interactúa con otros modelos terapéuticos para conformar un sistema de salud alternativo y complementario para millones de mexicanos.
Cabe señalar que la Secretaría de Cultura cuenta con un Programa de Patrimonio Cultural Inmaterial y Diversidad Cultural, cuyo objetivo es diseñar y coordinar estrategias que contribuyan a salvaguardar el Patrimonio Cultural Inmaterial, y la protección y promoción de la diversidad de las expresiones culturales, populares, indígenas y urbanas, a fin de colaborar en el desarrollo sustentable de México y la fracción VI Bis del artículo Sexto de la Ley General de Salud, dispone que el Sistema Nacional de Salud tiene entre sus objetivos el de promover el conocimiento y desarrollo de la medicina tradicional indígena y su práctica en condiciones adecuadas.
Asimismo, recordó que México cuenta con ocho expresiones culturales inscritas en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, siendo uno de los países de América Latina con el mayor número de manifestaciones inscritas y reconocidas; no obstante, “aún hay una gran riqueza patrimonial inmaterial que no ha sido inscrita, ni reconocida, como es el caso de la Medicina Tradicional mexicana”, subrayó la parlamentaria.
El segundo punto de acuerdo inscrito es para exhortar al titular del Ejecutivo que expida la declaratoria como Monumento Histórico, del Lote Funerario de los Diputados Constituyentes de 1917, ubicado dentro del Panteón de Dolores.
“El año pasado estuvimos en la celebración de los 100 años de nuestra Constitución. Hubo ceremonias, publicaciones, conferencias, pero desafortunadamente uno de los elementos más importantes, que sería el reconocimiento a este Lote Funerario donde descansan los restos mortales de los diputados constituyentes, no fue posible”, indicó.
La vocera del GPPRD señaló que el Gobierno Federal es el encargado de decretar la declaratoria y urgió a emitirla para garantizar su preservación. “Que se garantice que este espacio va a ser cuidado y, sobre todo, debe ser reconocido, no solamente en la cuestión inmaterial de la Constitución de 1917 y su recuerdo, sino también, darles justo valor a las personas que realizaron este documento sobre el cual basamos toda nuestra construcción legal”, enfatizó.
Por otra parte, respecto a la construcción de un edificio en el entorno de Ciudad Universitaria (CU), decretada el 23 de junio de 2007 Patrimonio de la Humanidad, la parlamentaria indicó que presentará un punto de acuerdo para que las autoridades correspondientes revisen los permisos otorgados al conjunto inmobiliario.
“Estamos a favor de la modernidad, a favor del desarrollo inmobiliario en la ciudad, pero siempre y cuando no dañe algo que es de todas y todos los mexicanos y de la humanidad, como Ciudad Universitaria, que tiene este carácter, y precisamente este trabajo costó a la Universidad cinco años para conseguir esta declaratoria de Patrimonio de la Humanidad”, finalizó.