Concluida en los hechos la 62 Legislatura, sin más iniciativas que negociar ni tramitar, Manlio Fabio Beltrones no esconde su deseo de dirigir al PRI.
En entrevista ayer con Adela Micha, conductora del noticiario matutino de Imagen Informativa, y ante la pregunta de que una vez terminados los trabajos de la legislatura qué iba a hacer, el sonorense respondió:
“Pues después de esto voy a ir a la Comisión Permanente como diputado Federal a esperar que el próximo mes de septiembre, que es cuando se termina la Legislatura, estaré a disposición –como siempre lo he hecho– de mi partido y muy atento a lo que está sucediendo con mi gobierno…”
- … es donde quieres estar ¿no?, en tú partido, le recordó Adela…
“Pues yo quiero…
- ¿Encabezar tú partido?, insistió ella…
“Lo que quiero es estar todavía más… ¿quién no quiere mejorar?”, subrayó.
Formalmente quienes integral la 62 Legislatura concluyen sus funciones hasta las 12 de la noche del 30 de agosto próximo, pero todos saben que eso no tiene la menor importancia ante el hecho real de que el domingo 7 de junio habrá ya 500 nuevos diputados electos.
Y de entre todos los diputados salientes el que atrae las mayores expectativas es justamente Manlio Fabio Beltrones debido a que con el término de esta legislatura no sólo concluye una coordinación y liderazgo cameral excepcional, con el mayor número de reformas constitucionales más profundo y amplio en toda la historia del Congreso mexicano, sino que termina una etapa legislativa que inició en el 2003.
Ese año Beltrones llegó a San Lázaro como propuesta al impulso que le dio el entonces presidente del PRI, el tabasqueño Roberto Madrazo.
Al llegar lo hizo compitiendo contra Elba Esther Gordillo por la coordinación del grupo de diputados del PRI. Beltrones perdió por unos cuantos votos frente a La Maestra y desistió de ir a una segunda vuelta.
Elba Esther –quien era además secretaria general del CEN del PRI-, sería desconocida meses después como coordinadora de aquella bancada al intentar someter a los diputados priístas a un aumento del IVA.
Frente a la defenestración de La Maestra, Beltrones se hizo a un lado en la contienda por suceder a Gordillo en la coordinación del grupo, contienda en la que participaron los mexiquenses Alfredo del Mazo y Emilio Chuayffet.
Ganó Chuayffet, Del Mazo pidió licencia y se fue y Beltrones fue marginado por el ahora secretario de Educación Pública. Desde entonces no existe una buena relación entre ambos.
En las conflictivas elecciones de 2006, Beltrones surgió como coordinador del grupo del PRI en el Senado, desde donde jugó un papel central en el mantenimiento de la Gobernabilidad en el país.
Con el país a punto de incendiarse por las acciones encabezadas por Andrés Manuel López Obrador contra el presidente electo Felipe Calderón, la posición de Beltrones fue central en la legitimación de la presidencia del panista al asistir a la toma de posesión junto con el resto de su bancada y la de diputados, entonces encabezada por Emilio Gamboa.
En los años siguientes Beltrones encabezó la llamada Reforma del Estado y dio paso a la primera Reforma Energética.
De esa legislatura salió Beltrones de regreso a San Lázaro para ser coordinador de su bancada y elemento central de negociación y aprobación de las reformas estructurales que pasarán a la historia como producto del llamado Pacto por México, encabezado por el presidente Enrique Peña Nieto.
Ayer concluyó esa etapa para Beltrones, quien ha dicho explícitamente que no aceptaría ningún cargo dentro del gabinete presidencial ni ninguna embajada.
Sin embargo ha expresado su deseo de ir a dirigir a su partido, el PRI.
Hoy, al cumplirse esta etapa, y estar a un paso del desempleo, el contexto alrededor de Manlio Fabio Beltrones pareciera que se abre a esa posibilidad.
Y esto ocurre porque las listas de diputados plurinominales del tricolor que operarán con base en la votación del proceso del 7 de junio, es encabezada precisamente por el mexiquense César Camacho, presidente del CEN del PRI.
Existe la regla no escrita de que quienes encabecen al PRI no deben ser simultáneamente ni legisladores y menos coordinadores de grupos parlamentarios, como al parecer lo va a ser César Camacho.
Es, dicen posible que Camacho deje la presidencia del CEN del PRI para ir a conducir a su bancada en San Lázaro, lo cual dejaría el camino libre para que Beltrones ocupara su lugar y cumpliera con esa aspiración.
Esto podría ocurrir, comentan, en cualquier momento de aquí al 30 agosto.
La otra opción es la del desempleo.
CAMBIOS
En la lógica de una reestructuración natural del área de comunicación social de la Presidencia de la República luego de la salida de David López el pasado 3 de marzo, y de la llegada de Eduardo Sánchez en su lugar, ayer se dieron los siguientes cambios:
•Se integran las funciones anteriormente asignadas a dos unidades administrativas -la Coordinación de Comunicación Social y el Vocero del Gobierno de la República- en una sola unidad denominada Coordinación de Comunicación Social y Vocería del Gobierno de la República, cuyo titular es Eduardo Sánchez Hernández.
•Desaparecen la Coordinación de Estrategia y Mensaje Gubernamental y la Coordinación de Vinculación, cuyas funciones han sido reasignadas a otras unidades administrativas. En su lugar se crean la Coordinación General de la Oficina de la Presidencia y la Coordinación de Marca País y Medios Internacionales.
Estos cambios, afirma, buscan agrupar, compactar y eficientar las funciones de diversas unidades de apoyo técnico y de la estructura interna de la Oficina de la Presidencia, conforme a las tareas y responsabilidades que ha encomendado el Presidente de la República.
Es así que además el presidente Peña Nieto nombró a Andrés Massieu Fernández como Coordinador General de la Oficina de la Presidencia, y a Paulo Carreño King como Coordinador de Marca País y Medios Internacionales.
Estas modificaciones, se asegura, no tendrán impacto presupuestal, ya que se trata de una reorganización interna que agrupa y compacta a las unidades de apoyo técnico, permitiendo ahorros y un trabajo más eficiente.
JUANITOS VAN POR DELANTE
Los coordinadores del PRI y PAN en San Lázaro echaron a andar ayer la probada fórmula de enviar como titulares a sus suplentes a la Gran Comisión del Congreso de la Unión.
El método les evitaría ir cada miércoles a las sesiones de ese cuerpo legislativo y permitirles sólo asistir cuando haya asuntos relevantes.
Es así que como titulares del PRI fueron enviados los diputados Manuel Añorve Baños; Cristina Ruíz Sandoval; Williams Oswaldo Ochoa Gallegos; Abel Octavio Salgado Peña; Enrique Cárdenas del Avellano; José Alejandro Montano Guzmán; Ricardo Fidel Pacheco Rodríguez.
Por el PAN quedaron, José González Morfín; Martín Alonso Heredia Lizárraga; Fernando Rodríguez Doval y Rocío Esmeralda Reza Gallegos.
Como sustitutos, del PRI, quedaron entonces el jefe de jefes Manlio Fabio Beltrones; Marco Antonio Bernal Gutiérrez, mano derecha de Beltrones; Roberto Ruiz Moronatti; Javier Filiberto Guevara González; José Rubén Escajeda Jiménez; Fernando De las Fuentes y Alejandro Rangel Segovia.
Por el PAN, fueron designados el coordinador del grupo y expresidente del PAN, Ricardo Anaya; Juan Bueno Torio; Juan Pablo Adame Alemán y Esther Quintana Salinas.
Es decir, los jefes echaron enfrente a los llamados “gatones”.
