Ciudad de México, México.– Con los reclamos de la oposición de fortalecer zonas metropolitanas pequeñas, contrarrestar hacinamiento y enfrentar la reconstrucción por sismos de septiembre pasado, la secretaria de Desarrollo Urbano, Rosario Robles Berlanga dijo que unas 55 mil viviendas resultaron con daños totales y otras 184 mil con parciales, en varios estados.
Además anunció que la próxima semana se inicia la entrega de ayuda a damnificados en la Ciudad de México. En su comparecencia por la glosa del quinto informe de gobierno, también hablo de estar en marcha una reforma urbana silenciosa con visión integral, que inició tras sentarse las bases institucionales y legales en este sexenio.
Esas cifras la arrojaron los diversos censos que se realizaron casa por casa, junto con autoridades estatales y municipales, indicó al comparecer ante Comisiones Unidas de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial, de Reforma Agraria, de Desarrollo Metropolitano, y de Vivienda, en el marco de la glosa del V Informe de Gobierno del Ejecutivo federal.
Después de realizar los censos, inició la demolición y recolección de escombros en las entidades afectadas. “Llevamos más de dos millones de toneladas de escombros y miles de casas demolidas, que es el equivalente a llenar con piedra varias veces el Estadio Azteca”, agregó.
A pregunta expresa de la presidenta de la Comisión de Vivienda, diputada Carolina Viggiano Austria (PRI), Robles Berlanga señaló que en el caso del estado de Oaxaca ya se está concluyendo la entrega de las tarjetas bancarias con los apoyos económicos para los damnificados.
En Chiapas prácticamente concluyó ese proceso y la gente está construyendo sus nuevas viviendas; la semana pasada inició la entrega de las tarjetas en Morelos, ayer jueves comenzó en el Estado de México, mañana sábado inicia en Puebla y la próxima semana en Guerrero, Veracruz y la Ciudad de México.
“Estamos en este proceso de entrega de las tarjetas que se acompaña de una asistencia técnica”, para construir bajo nuevas reglas por la existencia de zonas sísmicas, apuntó la titular de Sedatu.
“Estamos acompañando a los municipios para que haya nuevas reglas de construcción y se atienda la realidad, son zonas sísmicas y se tiene que construir de manera diferente”, añadió.
Sostuvo que “estamos frente a un reto gigantesco”, porque a la construcción de casas previstas en los programas formales de vivienda en las entidades afectadas, ahora se suman las que se destruyeron por los sismos.
Precisó que en Oaxaca las viviendas que se construían cada año, en promedio, eran mil 174 y ahora van a tener que ser 25 mil 635; en Chiapas eran mil 800 y ahora será 10 mil 511; en Morelos eran mil 379 y ahora se construirán cinco mil 963; en Guerrero eran mil 51 y ahora serán dos mil 485; en Puebla eran cinco mil y ahora serán cinco mil 538.
La funcionaria federal aclaró que la Sedatu no maneja un solo centavo de los recursos que se entregan a los damnificados, ya que eso se lleva a cabo directamente a través del banco.
También se refirió a la transparencia de este proceso, que se lleva a cabo a través de un folio de los beneficiarios, con la participación de los tres niveles de gobierno, y que de la entrega de recursos se da cuenta puntual en una página de Internet del gobierno de la República.
Aseguró que a partir de la próxima semana se entregarán en la Ciudad de México los apoyos económicos para cinco mil 974 viviendas afectadas por los recientes sismos, que pueden ser incorporadas al Fondo de Desastres Naturales (Fonden). La Ciudad de México ha tenido el mismo tratamiento que los otros estados afectados, indicó.
Dijo que se levantaron censos casa por casa, con la supervisión del gobierno de la Ciudad de México y de siete de ocho delegaciones afectadas por los sismos, con excepción de las autoridades de Álvaro Obregón, que se negaron a que se llevaran a cabo y por lo tanto su población no tendrá acceso a este beneficio.
A pregunta expresa del diputado Jesús Salvador Valencia Guzmán (Morena), la funcionaria federal indicó que las viviendas que pueden ser incorporadas al Fonden suman cinco mil 974, de las cuales tres mil 624 tienen daño parcial y dos mil 350 daño total.
Precisó que los propietarios de las viviendas con daño total recibirán las tarjetas bancarias con 120 mil pesos y las de daño parcial con 15 mil pesos.
Robles Berlanga comentó que en la Ciudad de México también se pusieron en marcha mecanismos especiales para viviendas de sectores medios que no entran en la lógica del Fonden, pero que fueron afectadas por los sismos.
Mencionó que los créditos de hasta dos millones de pesos tienen condiciones muy favorables, que permiten que la gente sólo pague los intereses y pueda volver a tener su vivienda, aun cuando no esté en el marco del Fonden.
También dijo que en el caso de la población derechohabiente del Fovissste y del Infonavit se realiza, primero, el proceso de las aseguradoras de estas instituciones y después recibirá los recursos para poder mejorar o recuperar su vivienda.
La titular de la Sedatu aseveró que sí han actuado en la Ciudad de México tras los sismos del pasado mes de septiembre y se ha hecho “de la mano del jefe de gobierno y de todos los delegados, a excepción del de Tláhuac, que no hemos logrado encontrar, pero con su gente hemos trabajado de la mano”.
Resaltó que la Ciudad de México ha tenido el mismo tratamiento que las otras entidades, en materia de reconstrucción por los sismos, y señaló que no hay razón para que se sienta excluida.
“Nos llama mucho siempre la atención lo que pasa en la Ciudad de México, es nuestra capital, yo misma la quiero y la amo profundamente”.
Sin embargo, agregó, “la afectación en Chiapas y en Oaxaca, por poner un ejemplo, no es tan fuerte mediáticamente y no llevó a tanta muerte, pero fue mucho más grande y estamos hablando de los estados más pobres del país. Ahí también la solidaridad de todos, como mexicanos, es vital”.
