El legislador de Morena acusó a Núñez de mostrar sin duda una de las caras represivas del gobierno federal, que a su vez se encuentra inconforme con los resultados de sus reformas estructurales, como la energética, por el entorno mundial el cual ha impuesto baja a los precios del petróleo.
En este contexto, Huerta Ladrón de Guevara recordó que “Enrique Peña Nieto ya ha dicho que él no es responsable de la caída de los precios del petróleo, pero de lo que sí es responsable es de haber puesto al país literalmente a la venta en materia de energía y electricidad; como sabemos, ya las compañías mundiales han decidido recortar miles de puestos en la industria petrolera ante la baja inesperada de sus precios y están viendo con reserva las inversiones para el plazo inmediato, lo que viene a afectar el desarrollo económico”.
“La postura de Aristóteles Núñez resulta del todo incongruente, pues al tiempo que nuevos ciudadanos se agregan de buena fe al régimen de incorporación fiscal (RIF) y contribuyen a compensar el desequilibrio a las finanzas públicas, resulta que a los grandes empresarios les perdonan, otra vez, millones de pesos. Y tal es el caso de empresas como Sabritas, Gamesa, Prologis y Scotiabank, como lo publica prensa nacional quienes presuntamente ocasionaron perjuicio por una cantidad de mil 124 millones de pesos, como o denunció el Auditor Superior de la Federación”, añadió.
Más lamentable es que en esa misma ruta de perdones y condonaciones fiscales, Televisa haya sido beneficiada con el no pago de más 3 mil millones de pesos, decisión que cuestionamos en su momento y exigimos determinar su legalidad, recordó Huerta Ladrón de Guevara.
El vicecoordinador del MORENA, finalizó con lo siguiente:
“Como en su oportunidad lo dijimos, lamentablemente serán de nuevo las familias quienes paguen por el costo de las reformas del gobierno federal, ante la ausencia de un verdadero plan económico, y en donde prive la austeridad republicana en el ejercicio de gobierno, le apuesta a que los ciudadanos asuman la falta de ingresos públicos”.
Por ello, “es reprobable” que el titular del SAT confiese “sentirse presionado” para cumplir meta de ingresos ante la caída del petróleo y con ese fin amenace al grueso de los causantes con medidas severas para el cumplimiento de las obligaciones fiscales, cuando no puede con las grandes compañías quienes tienen más poder de elusión que los ciudadanos comunes. Evidentemente lo legítimo sería que las grandes compañías no se les perdonará un solo peso”.
