A nadie sorprende la falta de pericia y oficio político de Trump, ni las pifias monumentales en poco más de 100 días al frente del gobierno del país más poderoso del mundo.
No obstante, Trump parece estar caminando sobre la misma senda que llevó a Richard Nixon a dimitir al poder en agosto de 1974, luego de que la crisis del Escándalo Watergate lo obligara a abandonar en forma vergonzosa la Casa Blanca.
La lección no aprendida muestra que el ejercicio del poder es muy distinto a la guerra electoral de una campaña política y que un gobierno no puede manejarse como una empresa, pues las diferencias son abismales y requieren de un probado oficio político y de un intenso trabajo de base.
Guardadas las proporciones, lo mismo ocurrió el Guerrero, con el abarrotero Zeferino Torreblanca, quien administró el estado como una empresa, con las consabidas consecuencias y los resultados entregados: una entidad convulsionada por todos lados, en lo económico, en lo social, en lo político, pero sobre todo en la inseguridadg.
En México, ese desconocimiento de la memoria histórica se ha hecho presente en las campañas pre electorales con miras a la elección de junio, principalmente, en el Estado de México, bastión del actual grupo en el poder y en donde todo parece indicar que ocurrirá una elección de estado.
Es obvio que el presidente Peña Nieto no puede permitirse perder en territorio mexiquense, pues su partido no ha perdido una elección a gobernador en casi 90 años de historia.
Tampoco puede permitir que el Grupo Atlacomulco, del que surgió para llegar a los Pinos, muestre que ha perdido masa muscular y se vea apabullado por el efecto López Obrador.
Pareciera que los priistas siguen desdeñando las lecciones de la historia y están repitiendo el esquema que llevó a Ernesto Ruffo Appel a convertirse en el primer gobernador de oposición, por el PAN en Baja California en 1979.
Al igual que ocurrió entonces, la jerarquía priista puso en actividad a sus más reconocidos cuadros, para apoyar la candidatura de Margarita Ortega Villa, una mujer con una brillante trayectoria en la función pública, eficiente legisladora, pero que encarnó una candidatura con un perfil bajísimo, para enfrentar a Ernesto Ruffo, un singular y carismático candidato que llegó a la contienda con el hándicap de haber contribuido a la destitución de Xico Leyva, un gobernador priista, que aderezó su gestión con el escándalo, la corrupción y el nepotismo.
Con un esquema tan demandante, la dirigencia nacional del PRI tomó la poco acertada estrategia de “fortalecer” la candidatura de Margarita Ortega, enviando a Baja California a los priistas de renombre y sus equipos, para ganar “como fuera” la elección en ese estado.
Pero una exigencia de este nivel, y la historia lo confirma una y otra y otra y otra vez, no puede enfrentarse con un ejército de “generales” sin vínculo alguno con la realidad local y mucho menos con la ausencia de tropa que aterrice las propuestas con un eficiente trabajo de campo que se traduzca en acciones de campaña que convenza, que calen hondo y se traduzcan en votos hacia la causa.
A unas semanas de la elección en el Estado de México, el priismo repite aquella experiencia de Baja California en 1979, caracterizada por la confusión, la desorganización y la falta de directrices útiles para ganar la preferencia del electorado.
De la misma manera que ocurrió entonces, el caos reinante de ahora, refleja cómo la política en nuestro país se ha ido degradando, porque en la elección de la llamada Joya de la Corona, pareciera que todos reman en direcciones opuestas, en detrimento de la imagen y las propuestas de Alfredo del Mazo.
En 1979, ese desconcierto, esa maquinaria de mil cabezas y esa lucha de egos encendidos, fue consignada por el periodista Víctor Islas en su libro, “La estampida de los búfalos” y dio origen a la columna homónima que aún se publica en un diario bajacaliforniano.
Si la sabiduría popular acepta que el hombre es el único ser que tropieza dos veces con la misma piedra, en política, esta máxima no debiera ser una realidad aprobada. Por el contrario, tendría que representar un acicate para no repetir esquemas perniciosos que sean augurio de derrotas anunciadas.
Recientemente tenemos el más claro ejemplo en el gobernador Independiente de Nuevo León, Jaime Rodríguez “El Bronco”, de que su triunfo estuvo basado en las circunstancias del país, en el hartazgo de la gente, en las redes sociales y la gran comunicación, a pesar de haberse volcado toda la maquinaria priista.
Si la realidad tiene cabeza dura, como aseguraba el maestro Juan María Alponte, en esta contienda electoral la frase no tiene desperdicio porque en el contexto, el panorama actual en el Estado de México es copia fiel de lo ocurrido en Nuevo León, pero sobre todo, en 1979 en Baja California.
Con campañas que se han convertido en escenario exclusivo de acusaciones mutuas y en el que lodazal está a todo lo que da, MORENA sigue creciendo al influjo de Andrés Manuel López Obrador que, a cada golpe y frente a cada acusación, tiene la capacidad de reinventarse y crecer.
Es algo que panistas y priistas siguen sin entender, ofreciendo publicidad gratuita y efectiva a sus contrincantes, en un panorama en el que las propuestas siguen siendo lo de menos. ¿O usted qué opina distinguido lector?
Movimientos telúricos…Al menos un muerto y 23 lesionados se registraron en el “festival” Acamoto 2017, que sepa a quién demonios se le ocurrió autorizar, porque al menos, nos parece una ocurrencia de un evento de cerca de cinco mil motociclistas que dejan al Puerto de Acapulco hecho un muladar y que sólo se convierte en un “reventon” de personas que llegan a una fiesta de sexo y alcohol…sin duda, no sé dónde tienen la cabeza las autoridades de ese municipio, porque que, que yo sepa, no hay derrama económica por tantos desfiguros que ocasionan los “motonetos” y que en nada beneficia a Acapulco y claro, justos pagan por pecadores…Ayer, fue día de Conferencias de prensa luego de que el PAN y el PRD anunciaran el sábado su intención de ir en alianza a las elecciones presidenciales de 2018…En el partido MORENA, se anunció que serán cuatro ejes fundamentales los que habrán de operar cuando Delfina Gómez tome posesión como gobernadora del Estado de México, claro en caso de ganar…no se permitieron preguntas y nada se dijo sobre el Frente Amplio Opositor…Por la tarde, también el PRI ofreció una conferencia, en sus instalaciones en Insurgentes, en donde su presidente, Enrique Ochoa Reza exigió que MORENA transparente 550 millones de pesos de gasto público y que hoy presentarán una denuncia ante las autoridades correspondientes…Del Frente Amplio Opositor que piensa hacer el PRD y PAN en el 2018, Ochoa simplemente dijo que esos partidos están enloqueciendo…marcop1955@hotmail.com
