El dictamen, aprobado en la sesión del pasado 17 de mayo, señala que la alimentación sana y adecuada es uno de los derechos reconocidos en diversos instrumentos internacionales y en el marco jurídico de nuestro país.
Advierte que el sobrepeso y la obesidad se han convertido en un problema de salud pública, y autoridades de distintos niveles de gobierno han emprendido acciones para atender las consecuencias derivadas de esta epidemia.
Asimismo, el documento indica que en las cooperativas de las escuelas se le da prioridad a la venta de productos altamente calóricos: 81 por ciento de estos establecimientos en el país ofrecen dulces, 78.8 por ciento botanas industrializadas, 71.8 por ciento refrescos y 48 por ciento pastelitos industrializados.
En contraste, sólo 50 por ciento vende agua pura embotellada, 29 por ciento, yogurt, otro 20 por ciento, verdura fresca, y sólo 19 por ciento leche. Por su otra parte, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 precisa que, de 1999 a 2012, la obesidad en los niños en edad escolar creció de 26.9 por ciento a 34.4 por ciento.
La senadora del Grupo Parlamentario del PRI, Verónica Martínez Espinoza, dijo que una alimentación sana y adecuada es clave para gozar de una buena salud, sobre todo, ante la persistencia del sobrepeso y la obesidad, que se ha convertido en un problema de salud pública, en niños y adolescentes.
Esa situación, advirtió, afecta negativamente su rendimiento, aprendizaje, desarrollo pleno y autoestima; además aumenta el riesgo de adquirir enfermedades crónicas a lo largo de su vida.
El senador del Grupo Parlamentario del PRD, Isidro Pedraza Chávez, recordó que el Senado de la República no ha sido capaz de aprobar la Ley del Derecho a la Alimentación, que permitiría legislar en torno a este y otros temas.