Les recordó los senadores Roberto Gil Zuarth, del PAN, y Miguel Barbosa Huerta, ahora del PT presentaron sendos proyectos que no han sido analizados.
La exigencia de Escudero fue directa a los despachos de los senadores Fernando Torres Graciano, presidente de la Comisión de Defensa Nacional; Ernesto Gándara Camou, presidente de la Comisión de Seguridad Pública; Ricardo Barroso Agramont, presidente de la Comisión de Marina; Alejandro Encinas Rodríguez, presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Segunda; y a la senadora María Cristina Díaz Salazar, presidenta de la Comisión de Gobernación.
El presidente del Senado indicó que ante las circunstancias los senadores no pueden continuar eludiendo su responsabilidad.
“El único mecanismo para que las fuerzas armadas regresen a sus cuarteles, es por medio de esta Ley de Seguridad, que los va acotar, y que les va aplicar controles”, afirmó
La única forma de que esto ocurra, agregó, es obligando de una vez por todas a que gobernadores y alcaldes inviertan en la capacitación sus policías y así superar la debilidad institucional que padecen y que es lo que ha obligado al ejército a estar en las calles.
Nadie hoy, afirmó, puede argüir que el Senado quiere militar a México con esta Ley.
Dijo que la Junta de Coordinación Política –integrada por los coordinadores de los grupos parlamentarios- deberá establecer el calendario para ir a un periodo extraordinario a aprobar el dictamen de esta Ley de Seguridad Interior.
En ese mismo período debería servir para fortalecer la Ley contra el robo de Hidrocarburos y quizá sacar adelante el nombramiento del Fiscal Anticorrupción, que se dejó en suspenso, así como las modificaciones que requiere la Ley Orgánica de la Procuraduría General de la República.
Por lo demás Escudero pidió una investigación a fondo de los acontecimientos en Puebla.
Sin embargo, no dejó de sorprenderse de que, con respecto al soldado que fue asesinado por la espalda de siete u ocho disparos de bala a manos del huachicolero que luego fue ejecutado, nadie diga nada.
“Pareciera que dan por sentado que los militares si tienen que ir a morir ahí, y de eso no pasa nada. Si a un militar le disparan por la espalda y cae abatido, no pasa nada, para eso gana siete mil pesos, para irse a morir ahí. De eso, nadie quiere decir nada”.
AMLO, OOOTRA VEZ Palmarito, Puebla
Y justamente en este caso señalado por Escudero cayó de nuevo Andrés Manuel López Obrador, quien oootra vez acusó al Ejército Mexicano de reprimir a los ciudadanos.
A través de un pronunciamiento que en sí mismo es una condena al Ejército, AMLO le exigió desde Pánuco, Veracruz al presidente Enrique Peña Nieto “cesé la violencia desatada desde el gobierno en contra de seres humanos.
“Como bien se observó en un video donde un militar le da un tiro de gracia a un civil en Puebla (sin señalar que antes ese civil disparó y mató a un soldado por la espalda).
“Peña debe de pronunciarse hoy mismo en el sentido de que va a cambiar la estrategia fallida que se ha utilizado para, supuestamente, enfrentar el problema de la inseguridad y la violencia, no más represión, que no se siga utilizando al Ejército para reprimir al pueblo (es decir, lo de Palmaritos Puebla fue un acto de represión del ejército contra el pueblo y no un acto de respuesta a una emboscada organizada por ladrones de hidrocarburos donde estos colocaron a niños y mujeres como escudo)”, insistió.
Y el de Macuspana le demandó a Peña Nieto regresar a los militares de inmediato a sus cuarteles (por supuesto que no dijo quien piensa él quien entonces deberá enfrentar a la delincuencia organizada en el país si los militares son retirados de esta tarea).
Pero no todo quedó ahí. Ya encarrerado en la defensa de los huachicoleros, AMLO dijo:
“Es que no hay ninguna ley que autorice a nadie a asesinar a sus semejantes, se están violando todos los derechos humanos, todos los protocolos de derechos humanos” (es decir, el Ejército Mexicano no sólo es represor, sino asesino).
“Y esto es también es muy riesgoso, este proceder, porque da pie a que gobiernos extranjeros quieran inmiscuirse en los asuntos que solo competen a los mexicanos”, concluyó.
Esta animadversión de AMLO hacia las Fuerzas Armadas mexicanas, viene al menos desde que la Marina usó un helicóptero para abatir a un capo del narco y sus sicarios en Tepic Nayarit. En esa ocasión AMLO acusó a la Marina de excederse en el uso de la fuerza y de haber matado a niños en ese operativo.
El tabasqueño no rectificó a pesar de que Marina le confirmó que en ese operativo ni había niños entre los abatidos y que estos utilizaban armas de gran alcance.
A partir de ese momento AMLO ha insistido en que el Ejército no debe combatir a la delincuencia organizada y que es usado por el gobierno de Peña Nieto para reprimir a los mexicanos.
‘Ya no queremos masacres’, ha dicho. Por supuesto que en su comentario el masacrador es el Ejército.
INVERSIONES A PESAR DE…
Alejandro Ramírez Magaña, presidente del Consejo Mexicano de Negocios y cabeza de la familia propietaria de Cinépolis le informó ayer al presidente Enrique Peña Nieto que quienes integran el capital de las 50 empresas más grandes de México, han decidido invertir en lo que resta del año 31,430 millones de dólares, ciertamente un 6% menor a los 33,500 millones de dólares invertidos en 2016, pero sobresaliente en un contexto de incertidumbre y volatilidad muy distintos a los del año anterior, le dijo.
Con esa inversión agregó Ramírez Magaña se crearán un millón 370 mil nuevos empleos y cerca de dos millones a nivel global.
A su vez el mandatario mexicano señaló que estos 31,430 millonbes de dólares se sumarán a los 135 mil millones de dólares ya invertidos en México desde el exterior e interior del país es sus cuatro años de gobierno
Recordó que en el sexenio de Miguel De la Madrid, la inversión promedio por año fue de 6 mil y que la del residente Carlos Salinas fue por 13 mil millones de dólares. Mientras que con Ernesto Zedillo llegó a los 36 mil millones de dólares.
Con el presidente Fox fue en total de 97 mil millones de dólares y con el presidente Calderón de 107 mil millones de dólares a lo largo de su administración.
Todo ello ha dejado una ruta de desarrollo y confianza, dijo que se consolida hoy con lo alcanzado por su administración… “no es casualidad. Se basa en entorno económico atractivo, a pesar, como ya lo señalaba, de un contexto internacional adverso”.
Peña Nieto reforzó su comentario con una serie de datos de ingreso fiscal y de consumo interno y producción.