Dice Tomás Zerón estar tranquilo por desaparición de normalistas y defiende “verdad histórica”del caso

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Guerrero
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La verdad histórica, en torno a la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, “siempre ha sido mi postura y la voy a seguir manteniendo”, sostuvo.

El ex director de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, a quien se le acusa de haber manipulado la supuestas escenas del crimen y construyó junto al ex procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, la multicitada verdad histórica, se dijo tranquilo, “y esperemos que la resolución salga pronta para poder ir adelante con este tema”, en referencia a las imputaciones en su contra por haber sembrado evidencias en el río Cocula, hecho que contribuyó decididamente a desvirtuar la investigación sobre el destino de los estudiantes secuestrados.

Seguro de sí, el funcionario federal insistió en que de la verdad histórica se encuentra seguro al “100 por ciento, la verdad histórica la sigo yo soportando”.

En los últimos días este funcionario ha retornado al torbellino del escándalo, una vez que la Secretaría de la Función Pública halló responsabilidades administrativas –descartando las penales– en torno a la siembra de pruebas falsas por parte de Zerón de Lucio.

Cuando se le interrogó sobre la certeza de su trabajo, éste replicó:

“Espero que se dé pronto una respuesta (de parte de la Función Pública), yo solicité esta investigación y, si hay un culpable, que sea castigado; vamos a ser respetuosos de las instancias, ya la PGR se pronunció y esperamos que el órgano de control así lo haga”.

Tomás Zerón acudió a la Cámara de Diputados a un foro sobre seguridad nacional. Una vez que se retiró, al interrogar a la diputada de Morena Araceli Damián –integrante de la comisión especial para el caso Ayotzinapa– sobre el papel del funcionario en la investigación de la desaparición de los alumnos, respondió: “la verdad histórica es la verdad que Tomáz Zerón construyó junto a Jesús Murillo Karam, y por esa la tiene que defender”.

“Él está obligado a explicar a la ciudadanía por qué incurrió en la ilegalidad. Por qué no incluyó pruebas en el expediente: con lo que se conoce con la información sobre telefonía, se desprende que Alexander Mora fue llevado a Huitzuco, y no al basurero, entonces no hay una coherencia en la hipótesis de la verdad histórica. Hay muchas lagunas de los que sucedió esa noche”.