¿Los cargos? Casi seguro lavado de dinero y evasión fiscal. Muy probable: enriquecimiento inexplicable, peculado, desviación de recursos, abuso de poder.
La razón real: haberse convertido en una amenaza no para el Presidente de la República en turno, sino para el Sistema Político.
De ser así, sería el fin de una larga y profunda historia de desvaríos y locuras de poder sumada a otra de desmedida corrupción.
Estos Yunes son 4. El jefe es Miguel Ángel Yunes Linares, y debajo de él están sus hijos Miguel Ángel (40 años), Omar (38 años) y Fernando (34), todos ellos de apellidos Yunes Márquez.
Todos, desde que el padre renunció al PRI en 2004, son panistas.
Miguel Ángel, el más grande de los hijos es hoy alcalde de Boca del Río.
Omar, y quien al parecer irá a prisión con su padre, es un exitosísimo empresario que ha hecho una impresionante fortuna a partir e casi cero.
Y el tercero de esta tropa es Fernando, quien a sus 34 años es senador y presidente de la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara Alta.
Miguel Ángel Yunes Linares ganó el pasado 5 de junio la gubernatura de Veracruz luego de aspirar a ese cargo durante al menos los últimos 18 años.
La primera vez que quiso ser gobernador, en 1998, se la ganó Miguel Alemán y frente al hijo del expresidente nada pudo hacer.
Luego, en el proceso de 2004, “se le adelantó” el peor de sus enemigos políticos, Fidel Herrera lo que provocó que se saliera del PRI. Fue algo que hasta hoy no le perdona a Fidel.
Seis Años más tarde y habiendo obtenido la candidatura del PAN en el proceso de 2010, Herrera, como gobernador del Estado, maniobró y logró que Javier Duarte lo derrotara.
Seis años después, en una jugada destinada precisamente a hacerle la vida imposible, el gobernador Javier Duarte presentó una iniciativa que le fue aprobada por la mayoría priísta del Congreso Local, para acotar a 2 años la gubernatura de Veracruz a fin de empatarla con la elección presidencial de 2018.
Es así que al final Yunes Linares logró su objetivo de ganar la gubernatura de su Estado, pero sólo por 2 años no por 6 como era su aspiración.
Eso es algo que nunca superará.
Hasta aquí la crónica de sus ambiciones políticas.
Yunes Linares se inoculó el virus de la ambición desmedida del poder, luego de ser secretario General de Gobierno con Patricio Chrinos, quien ocupó el cargo de gobernador de Veracruz entre 1992 y 1998.
Miguel Ángel, quien contaba entonces con 40 años de edad y cuando sus hijos entraban a la pubertad, vivieron en el mejor de los mundos posibles.
Chirinos, un personaje alérgico a los eventos públicos y a los medios de comunicación, afecto a la bebida, prácticamente le dejó en sus manos la conducción del gobierno, cosa que Miguel Ángel ejerció con pasión.
Explosivo, de carácter irreflexivo, afecto a las artes marciales, Yunes Linares hizo más enemigos que amigos en su paso por ese encargo.
Desde entonces comenzó también a acumular riqueza. Las mansiones, los autos caros, los viajes por el mundo, las escuelas en el extranjero fueron lo común entre él y sus hijos.
Miguel Ángel y Fernando lo siguieron en el mundo de la política. Omar por el contrario se hizo cargo del manejo de los dineros de la familia.
Entre 2003 año en que llegó a la cámara de Diputados al lado de Elba Esther Gordillo, entonces coordinadora de la bancada del PRI y secretaria General de este partido junto con Roberto Madrazo, presidente del mismo, Yunes Linares utilizó a La Maestra para ocupar cargos en los regímenes panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Así fue subsecretario de Seguridad Pública y luego director del ISSSTE.
En esos 10 años Yunes Linares y sus 3 hijos se hicieron inmensamente ricos.
Hoy la vida y el Sistema parece que les van a cobrar facturas. De acuerdo a los informes Yunes Linares pasará a formar parte del escuadrón de los uniformados con rayas, esos que viven tras las rejas, junto con su hijo Omar, quien -aseguran quienes saben-, no tiene la menor forma de comprobar el origen de los quien sabe cuántos miles de millones de pesos ha manejado para comprar casas, edificios, mansiones y otros bienes en México y EU. Todos a nombre de su papá y de él o sus hermanos.
En fin. Todo eso deberá ocurrir antes del 1 de diciembre, fecha señalada por la Constitución de Veracruz para que Yunes Linares asuma el cargo de Gobernador.
Y deberá ser en cualquiera de los siguientes 43 días porque si logra asumir el cargo, entonces contará con fuero y el asunto de su consignación será mucho más complicado.
¿CIMBRARÁ AL PAÍS?
Hoy Yunes Linares sabe que está contra el paredón. Por eso a mediados de la semana pasada, el día en que Javier Duarte pidió licencia para separarse del cargo de gobernador de Veracruz, en lugar de alegrarse salió para advertir en una conferencia de prensa que le querían impedir asumir el cargo.
El caso es que los Yunes saben que están ante la posibilidad de ir a la cárcel desde al menos abril, cuando Univisión transmitió en Estados Unidos y el resto del continente y el mundo una grabación telefónica entre Omar y su padre, en la que hablan de una transacción de 55 millones de dólares para adquirir un edificio de departamentos en el centro de Manhattan, en Nueva York.
Un mes después Omar tramitaría varios amparos. Y Miguel Ángel Yunes Linares comenzaría a ver cómo a su gubernatura le salían alas.
Nerviosos, evidentemente enfrentados a la posibilidad de que su buena suerte y fortuna cambien radicalmente para ellos y el resto de su familia, los Yunes al parecer han decidido ir a la batalla de la supervivencia.
Por ello, dicen, Miguel Ángel Yunes Linares en lugar de salir a celebrar la caída de Duarte, encabezó una conferencia para advertir que podría caer antes de tomar posesión del cargo.
Fue entonces que amenazó con revelar una información que “cimbrará al país” entero.
Hay quienes afirman que su defensa consistiría en decir que la desviación de miles de millones de pesos realizada por el gobernador Duarte, fue en parte para aportarla a la campaña del presidente Enrique Peña Nieto.
Claro que eso tendría que ir acompañado por documentos y testimonios que lo corroboraran, lo cual parece imposible.
Pero hay quienes aseguran que Miguel Ángel Yunes Linares y sus hijos están tan desesperados que el gobernador electo podría anunciar su participación como candidato presidencial para la contienda de 2018, creyendo que eso le brindaría inmunidad ante cualquier acción de la PGR.
Aprehenderlo sería entonces como un acto de incivilidad y barbarismo políticos del régimen, creen los Yunes.
Como sea, la rueda del verdadero poder ha comenzado a girar y los resultados los veremos pronto.