Subrayaron la necesidad que el Gobierno capitalino emita una opinión porque serán derribados mil 663 árboles y que, no obstante, estarán en riesgo potencial más de siete mil árboles, de los cuales el 16.89 por ciento son fresnos; en tanto que el cedro blanco, representa el 4.71; el ahuehuete, 0.03 y el colorín, 0.65 por ciento.
Destacaron que también están en riesgo más de 61 especies arbóreas dentro de las que se encuentran dos especies consideradas como monumentos urbanísticos y dos más están dentro de la NOM-059-SEMARNAT-2010. En cuanto a la afectación de la fauna destacan los daños a la Aguililla Rojinegra y la lagartija escamosa de mezquita, ambas sujetas a protección especial.
Las obras del Viaducto la Raza-Indios Verdes-Santa Clara, además del CETRAM, el Maxibús y la construcción de la Línea 7 del Metrobús, en su conjunto generarán aumento del comercio ambulante; mayor inseguridad y robos a peatones y pasajeros, así como severas afectaciones a las construcciones aledañas debido a las fallas geológicas de la zona, catalogada de alta sismicidad.
Destacaron que el Viaducto, con una longitud de 9.7 kilómetros, que se pretende dará servicio a un tránsito esperado de 50 mil vehículos por día, alienta más el uso del automóvil y con ello aumento de contaminantes por la combustión de hidrocarburos que se complicará aún más por la falta de árboles que limpien el medio ambiente.
Explicaron que la construcción del Viaducto se trata de un proyecto por Asociación Público Privada para la prestación del servicio de disponibilidad del mismo cuya única propuesta económica ganadora fue la de la empresa Promotora y Operadora de Infraestructura, (PINFRA).
Lamentaron que vecinos de las siete colonias por donde se prevé cruzará ese viaducto, Industrial, Calpultitlán, Guadalupe Insurgentes, Tepeyac Insurgentes, Lindavista y Santa Isabel Tola, hayan sido sorprendidos con el anuncio de estas obras por el gobierno Federal sin ser consultados.
Expresaron que la construcción de esta vialidad es una prueba más de que el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, carece de capacidad para crear proyectos urbanos sustentables, amigables con la naturaleza y peor aún, carece de calidad moral para consultar a los capitalinos sobre las mega obras que se desarrollan en la capital del país desde que ocupa su cargo sin importar la procedencia de los proyectos.
Señalaron que Mancera se ha subordinado excesivamente ante las órdenes del gobierno Federal que se caracteriza por imponer mega obras en beneficio de un sector que demanda servicios exclusivos de movilidad o de ayudar a sus amigos constructores en perjuicio de los habitantes de la Ciudad de México como son la construcción del Tren Interurbano México-Toluca, y ahora el Viaducto-La Raza-Indios Verdes-Santa Clara, cuyas construcciones afectarán bosques, manantiales y el Parque Nacional Tepeyac, en Cuajimalpa y Gustavo A. Madero, respectivamente.
