Ciudad de México, México.– La Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) presentaron el Mecanismo para la Prevención y Atención Integral a Víctimas de Casos de Hostigamiento y Acoso Sexuales en las Universidades Interculturales.
Este mecanismo plantea, con una visión integral desde la interculturalidad, el compromiso de las comunidades universitarias en todas las regiones del país para combatir el hostigamiento y el acoso sexual.
Propone estrategias de prevención y atención, desde los enfoques intercultural, interseccional, género y de derechos humanos, que considera las relaciones de género, la etnia, la lengua, la posición geográfica, la religión, así como las condiciones socioeconómicas que determinan una posición para hombres y mujeres en el entorno escolar. Con ello se motiva a la reflexión, el diseño y la puesta en marcha de acciones institucionales y comunitarias que, de manera conjunta, contribuyan a generar un presente más justo e igualitario, libre de cualquier forma de violencia.
Durante la presentación, el subsecretario de Educación Superior de la SEP, Luciano Concheiro Bórquez, señaló que la transformación social y educativa del país no es posible sin las mujeres; por ello, convocó a no silenciar los casos de hostigamiento sexual y acoso sexual, sino a fortalecer la prevención, la atención y la denuncia para lograr espacios seguros y libres de violencias.
Comentó que, desde la SEP, encabezada por su titular Leticia Ramírez Amaya, se desarrollaron dos estrategias para erradicar la violencia de género en las instituciones de educación superior; una perspectiva intercultural articulada con un enfoque interseccional, además de un poderoso trabajo de colaboración con el Inmujeres.
Recordó que la política intercultural de Educación Superior se fundamenta en las comunidades indígenas y afromexicanas que históricamente lucharon por definir su propio rumbo y por aprender a autodeterminarse bajo sus propios principios y cosmovisiones, a partir de su vida comunitaria, su autogestión y autogobierno.
En presencia de las y los rectores de las universidades interculturales del país, el subsecretario Concheiro Bórquez señaló que la interculturalidad es una práctica política que favorece la interrelación dinámica y transformadora entre los sujetos, comunidades e identidades lingüísticas, culturales, sociales y territoriales en su diversidad.
La presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann destacó que debido a que cada año se cuenta con más estudiantes mujeres, y a que 80 por ciento de ellas ha sido víctima de violencia por razón de género dentro de las instituciones académicas, es urgente implementar este mecanismo y revisar lo que está ocurriendo.
Un millón de mujeres mayores de 15 años han sido víctimas de acoso sexual y hostigamiento sexual. “Esto es algo que marca la vida de las mujeres, que las pone en un estado de alerta continuo y eso ha hecho que exista la deserción escolar”.
Resaltó la importancia de crear estrategias de manera integral como este mecanismo que aporta otra forma de abordar la igualdad, la prevención y la violencia desde un punto de vista intercultural, interseccional, desde una perspectiva de género centrada en las personas para que no tengan que sufrir revictimización.
“Este mecanismo no es sólo nuestro conocimiento, ya lo probamos en la Universidad Intercultural de Baja California con la comunidad estudiantil y académica, y funciona y sabemos que podemos mejorar; con esto tenemos herramientas para garantizar la igualdad y prevenir la violencia.”
Con este acto se fortalece el compromiso de tolerancia cero al hostigamiento y acoso sexual.
Además, el mecanismo busca generar una mirada compartida para que las propias comunidades universitarias sean un canal para ampliar su difusión y participación en las localidades donde se ubican y tienen presencia, y cumplir el objetivo de construir la igualdad y eliminar cualquier acto que lastime la dignidad y el desarrollo de las personas en los espacios universitarios.
Para ello, cada universidad adecuará cultural y lingüísticamente el mecanismo, colocando al centro en todo momento la atención integral a las víctimas por lo que el documento se irá fortaleciendo en la medida del trabajo que se desarrolle en cada universidad intercultural o en cada institución de educación superior.
El Inmujeres mantiene el compromiso de impulsar también instituciones libres de violencias, donde haya cero tolerancia a casos de hostigamiento sexual y acoso sexual.