Chiapas, México.– Gracias a la detección temprana y la atención quirúrgica especializada por parte de médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Eleisa Gómez Pérez, originaria de Pijijiapan, Chiapas, superó los dos padecimientos congénitos que presentó: atresia esofágica y duodenal, para actualmente llevar una vida cotidiana.
Eleisa nació a las 35 semanas de gestión, con atresia esofágica tipo 3 y una atresia duodenal. Ambos padecimientos fueron atendidos por médicos del Hospital General de Zona (HGZ) No. 2, del IMSS Chiapas, y de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) Hospital de Especialidades “Dr. Bernardo Sepúlveda Gutiérrez”, del Centro Médico Nacional (CMN) Siglo XXI.
De acuerdo con la doctora Daniela Miranda López, jefa de Pediatría y Cirugía Pediátrica del HGZ No. 2, “en este hospital se brindó la atención para los dos padecimientos congénitos. En el caso de la atresia duodenal, se restituyó el tránsito intestinal, de tal manera que la paciente pudo tener alimentación en el décimo día de la cirugía. Por su parte, para la atresia esofágica tipo 3, se realizó una esofagostomía y una gastrostomía. Luego, se efectuó la restitución del tubo digestivo superior a través de una interposición de esófago por colon”.
Explicó que, debido a los padecimientos, Eleisa, quien además fue prematura, tenía un riesgo mayor de morbilidad y mortalidad, por lo que su caso se considera de éxito por el buen manejo inicial que se le dio, ya que recuperó el estado nutricional”.
La doctora detalló que este es un caso de éxito del IMSS porque con Eleisa se cumplió el objetivo de que el paciente se reintegre socialmente, que sea igual a cualquier niño o niñas de su edad, que juegue, que realice actividades deportivas y que tenga una vida normal.
“En el IMSS Chiapas estamos comprometidos para seguir brindando atención a todos los padecimientos congénitos quirúrgicos y no quirúrgicos para darles a nuestros pequeños derechohabientes la oportunidad de una mejor calidad de vida”, expresó.
La mamá de Eleisa, doña Saraí Gómez Pérez, recordó que cuando su pequeña nació fue en ese momento que le informaron que presentaba una malformación; sin embargo, aunque fue un golpe fuerte y triste confiaba en los médicos del IMSS.
“Siempre confié en los médicos. A mí desde el primer día de vida de Eleisa me atendieron muy bien y me apoyaron con la alimentación complementaria. En los hospitales tuve una excelente atención médica. Mi hija siempre contó con los mejores aparatos, y todo el personal fue muy profesional y cálido porque también nos dieron apoyo emocional”, aseguró.
Durante una gira de trabajo del director general, Zoé Robledo, en el municipio de Pijijiapan, doña Saraí, se acercó al titular del Seguro Social para agradecerle el apoyo que el Instituto le dio a Eleisa, porque gracias a la atención integral que se le brindó su hija ahora tiene una vida normal como cualquier menor.
“Me acerqué a agradecerle al maestro Zoé por el trabajo arduo que está realizando y para decirle que en el Seguro Social hay gente que está haciendo bien las cosas y que tienen mucha calidad profesional y humana. Le presenté a Eleisa, la abrazó y se puso muy feliz por conocer este caso de éxito, que demuestra que en el IMSS se hace cosas muy buenas”, finalizó.
Hoy Eleisa tiene nueve años, cursa el cuarto grado de primaria y lleva una vida normal como cualquier niña o niño de su edad.