TRAS LA PUERTA DEL PODER
Por Roberto Vizcaíno
Son tantas las referencias en medios nacionales y extranjeros, las imputaciones de enterados, los señalamientos de sus críticos que la tarde del sábado el presidente Andrés Manuel López Obrador en el festejo de su triunfo hace 5 años no pudo sustraerse para finalmente asegurar que aquí, en el México bajo su conducción, ya no existe un ‘narcoestado‘.
Y, ya metido en eso, subrayar:
“Que se oiga bien y lejos, hasta el otro continente, pasando el Atlántico, tampoco existe hoy en México un narcoestado, como lo padecimos”
Poco antes de que cayera la lluvia que dispersó a quienes de cualquier forma fueron atraídos o arrastrados en peseros y autobuses al Zócalo para el festejo lopezobradorista, el mandatario alcanzó a señalar que ahora ya tampoco se violan en este país los derechos humanos porque él ha tomado medidas para evitar se reprima al pueblo en respeto a sus derechos esenciales.
Repartidor consuetudinario de culpas y de descargar en otros presidentes las responsabilidades que podrían bien imputársele a él, López Obrador dijo que a diferencia de los Gobiernos neoliberales y neoporfiristas, en su administración ya no se ordenan masacres ni se practican torturas.
Por el contrario, dijo con la serenidad de quien en realidad cree que está más allá del bien y el mal, hoy se han implementado acciones para combatir el narcotráfico y eliminar cualquier forma de complicidad entre el crimen organizado y las instituciones del Estado.
Sin poder sustraerse a la rutina de la retórica del discurso mañanero, y cómo había que llenar los largos espacios de una disertación considerada como histórica por los suyos, retomó temas que él ha repetido hasta el cansancio:
“No se han creado impuestos nuevos… y algo que es muy valioso: hay justicia y tranquilidad social y se avanza hacia la erradicación de la violencia, lo vamos a lograr entre todos, me canso ganso“,
Como suele ocurrir, su retórica chocó directamente ese día de frente a los informes del Sistema Nacional de Seguridad Pública que por la mañana había señalado que junio había sido el mes más violento de este año luego de sumar 2 mil 303 homicidios dolosos.
Y no solo eso, cuando hacía unas horas había sido asesinado en La Ruana, Michoacán un personaje emblemático en el combate a la delincuencia organizada y el narco, el empresario limonero Hipólito Mora junto a 3 de sus guardias a quien al menos 15 sicarios dispararon más de mil balas de alto calibre para finalmente incendiar su auto con él dentro sin que ningún cuerpo policiaco o militar haya hecho nada para impedirlo,
Y cuando en Guanajuato se había atacado a policías con un auto bomba para así cerrar el mes más violento en México donde AMLO es presidente.
El México en que el índice de asesinatos aumentó un 8 por ciento en comparación con los registrados de enero a mayo de este 2023, donde se reportó un promedio mensual de 2 mil 119 ejecuciones.
Hechos que no impactaron a López Obrador quien terminó diciendo que él mantendrá su estrategia de seguridad porque “vamos bien”, y que en todo caso sus críticos debían aceptar que la violencia e inseguridad que se vive hoy aquí es el remanente que le heredaron los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
O sea… nos salió bueno pa’repartir la leña, diría mí abuela.
CORCHOLATAS NO LEVANTAN
Metidos de lleno en una campaña que simula no ser campaña, sin poder criticar nada de lo mucho criticable, amarrados para no entrar en debates, y en medio de duras críticas de uno de los suyos, de Marcelo Ebrard quien los acusa una y otra vez de estar derrochando un dinero que quien sabe de dónde sale, los aspirantes de Morena Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña y Manuel Velasco siguen sin pintar ni sumar apoyos.
En la semana pasada dos de ellos, Sheinbaum y López vivieron momentos difíciles ya que a la exjefa de la CDMX le tuvieron que desmontar un evento a falta de asistentes y al otro lo tuvieron que sacar rápidamente de otro acto porque los acarreados se le comenzaron a poner pesados entre rechiflas y reclamos.
Con eventos menos pretenciosos, Ricardo Monreal ahora acompañado por su esposa, y Gerardo Fernández Noroña, vivieron situaciones más afectuosas y de mayor reconocimiento de los suyos sobre todo cuando el senador se quitó los zapatos y calcetines y se arremangó los pantalones para meterse al lago en Chiapas donde estaban un grupo de mujeres que lo invitaban a nadar.
A todas saludó y ellas lo festejaron y agradecieron.
Así inician su tercera semana de campaña luego de que el INE les validó sus eventos.
OPOSITORES SE DESCARTAN Y VAN 6 MENOS
Luego de que al arranque de su proceso de selección interna desistieron 3 aspirantes –Germán Martínez, Lily Tellez y Claudia Ruiz Massieu-, al cierre de la primera semana se bajaron otros 2 y otro dudaba en hacerlo.
En este cierre se bajaron el empresario Gustavo de Hoyos y el exgobernador de Oaxaca Alejandro Murat y se esperaba la definición de Enrique de la Madrid.
Todos ellos indicaron que era prácticamente imposible conseguir en apenas un mes las 150 mil firmas de adhesión que les exige la organización de Va por México para inscribirse.
Pese a todo el resto de los aspirantes siguen adelante: entre ellos están la senadora Xóchitl Gálvez, el diputado Santiago Creel, la senadora Beatriz Paredes, el diputado Ildefonso Guajardo, el exsecretario de la OCDE José Ángel Gurría, el exgobernador michoacano Silvano Aureoles, el senador Miguel Ángel Mancera, Gabriel Quadri y el colimense Jorge Luis Preciado.
A pesar de estas defecciones, la alternativa de Va por México con los que siguen dentro, al parecer representa una verdadera amenaza para AMLO y su 4T tanto que su festejo en el Zócalo terminó siendo una rabiosa arenga en contra de esa oposición.