TRAS LA PUERTA DEL PODER
Los hechos, las actitudes, los pronunciamientos indican que con o sin reforma electoral regresiva, Andrés Manuel López Obrador está decidido a hacerse del control del sistema electoral de México.
Es simplemente brutal: buscará mantener el poder más allá de su mandato.
¿Reelección? ¿Maximato? ¿un heredero pelele?
¡Bah! ¡Qué importa! Lo intentará, no hay duda, al menos para mí no la hay.
En este contexto la marcha de ayer pues sí, fue importante como expresión masiva, sobre todo de clases medias y sectores ilustrados, pero insuficiente.
Fue en domingo y sin ninguna propuesta, compromiso de continuidad.
Hoy ya está en San Lázaro la iniciativa de reforma de AMLO y hay intención de sacarla adelante contra todo obstáculo… y si no se puede, pues entonces irse por otras vías contra el sistema electoral y sus instituciones.
Ya los diputados oficialistas le quitaron creo 4 mil millones al presupuesto ya antes super rasurado del INE.
Cuatro consejeros saldrán pronto del Instituto –entre ellos Ciro y Lorenzo-, y hay al parecer la intención de que AMLO proponga personajes inaceptables para la oposición a fin de dejar sólo con 7 consejeros al INE.
Y el embate diario del mandatario va a continuar debilitando a las instituciones.
Frente a todo eso la advertencia de José Woldenberg ayer no sólo fue tibia, sino hasta naif.
“Estamos aquí reunidos con un solo objetivo claro y trascendente: defender el sistema electoral que varias generaciones de mexicanos construyeron, que ha permitido la convivencia y competencia de la pluralidad y la estabilidad políticas, la trasmisión pacífica de los poderes públicos y la ampliación de las libertades”.
Alguien le debió decir que ese sistema ya está casi en manos de AMLO.
Esta reforma en puerta no es para nada ni comparable ni igual que las 8 reformas realizadas entre 1977 y 2014,
Las autoridades autónomas electorales están a punto de dejar de serlas en cuanto se aplique el presupuesto del siguiente año.
¿Cuál autonomía ejercerán sin dinero?
La destrucción del sistema ya va a la mitad… y con las libertades, la democracia y las transiciones que conocemos van directo al caño.
“México no puede volver a una institución electoral alineada con el gobierno, incapaz de garantizar la necesaria imparcialidad en todo el proceso electoral… México no merece una reforma constitucional en materia electoral impulsada por una sola voluntad por más relevante que sea”.
Y concluye: por ello decimos: No a la destrucción del INE. No a la destrucción de los institutos locales. No a la destrucción de los tribunales locales. No a la pretensión de alinear a los órganos electorales a la voluntad del gobierno. No al autoritarismo. Sí a la democracia. Sí a un México democrático
¿Lo dijo en serio Woldenberg?
Mientras cientos de miles marchaban y Woldenberg arengaba, AMLO festejaba su cumpleaños en chanclas de hule y sonreía desde Palenque.
LAYDA SE BURLA Y MONREAL CONVOCA A LA CONCILIACIÓN
Sin el menor freno o temor, la gobernadora de Campeche Layda Sansores prosiguió la semana anterior con su actitud cínica, impune, en actitud de burla hacia 87 senadores de diversas fuerzas que mostraron su apoyo al senador Ricardo Monreal quienes exigieron parar la difusión de versiones amañadas, calumniosas por parte de la mandataria estatal.
En su agradecimiento a quienes lo apoyaron, el zacatecano advierte que siempre ha buscado impulsar a un Poder Legislativo independiente.
“Al país le conviene, porque la existencia de un contrapeso real, la existencia del equilibrio de poderes, la existencia de la autonomía de los mismos; ayuda a construir mejores sociedades, que se respeten los derechos y las libertades y que no se cometan excesos en nuestra sociedad.
“Por eso, me alegra mucho que hoy haya recibido con sorpresa y agrado, que 90 compañeros senadoras y senadores, hayan firmado una carta en mi respaldo, en solidaridad y condenando los ataques, las descalificaciones, los insultos, las diatribas, los actos ilegales que se han cometido en nuestra contra.
“Muchas gracias, senadoras y senadores. Eso me compromete mucho más a ser plural, incluyente y respetuoso de todos”, indicó.
Dijo ser un catedrático que no sólo cree en el derecho, sino que es respetuoso de la Constitución y la norma jurídica, y en la conciliación del país.
“No más rencor, no más odio: conciliación, para que este país sea mejor, más justo, más próspero, más democrático”, pidió.
Y advirtió:
“Aunque lleguen más ataques, no vamos a cambiar. Por eso confía”.