Ciudad de México, México.— Por la irresponsable inflación provocada por la pésima política económica y fiscal del país y de la CDMX, los contribuyentes ahora no tienen saldos a su favor ni devolución de impuestos conforme a la ley, dijo el diputado local panista, Ricardo Rubio.
De acuerdo con el también, integrante de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Publica del Congreso de la CDMX, un grave síntoma de que van mal las cosas es que recientemente el Instituto de Contadores Públicos alertó que las deducciones y saldos a favor por las hipotecas será nula o muy mínima para este 2022.
Y es que, según precisa el legislador, la inflación en 2021 fue del 7.36 por ciento en comparación con 2020 que fue del 3.15 por ciento y, en donde si hubo devolución de saldos a favor; de modo que si la tasa de interés que cobró el banco por un crédito hipotecario o de arrendamiento financiero es igual o menor a la inflación, no habrá deducciones ni saldo a favor y con ello desaparece el incentivo fiscal para que se permanezca en la legalidad.
“Esta grave situación afecta desde luego a particulares sobre todo a quienes tienen pendiente o están pagando un crédito hipotecario como de aquellos que brinda el INFONAVIT o bien, quienes tienen un arrendamiento financiero para pagar un vehículo que utilizan, pero afecta también gravemente a pequeños negocios y empresas familiares que son quienes mayormente utilizan estos esquemas de financiamiento y que brindan el 70 por ciento del empleo en el país y la ciudad”.
Desde luego, esto implicará una desaceleración económica, lo que acarrea perdida de empleos, cierre de micro, pequeños y medianos negocios que esperaban este retorno de impuestos o saldo a favor para oxigenar su negocio y sobrevivir.
Para el legislador y también integrante de la Comisión de Desarrollo Económico, es un duro golpe a quienes se encuentran en la formalidad y se generan incentivos para ya no serlo.
Otra teoría del diputado Rubio es que según el fuentes del propio Gobierno encargados del tesoro público, esto podría tratarse de una “inflación de estado” como sucede en países donde se vive en autocracia. “Lo que implica una perversa estrategia del Gobierno Federal ajustado precios de determinados productos básicos para provocar una inflación manipulada oficialmente y de ese modo hacerse a la mala de recursos no devolviendo saldos a favor en perjuicio de quienes generan a la buena ganancias justas para beneficio propio y de sus familias”.
“Aquí una muestra clara de que el Gobierno de MORENA desprecia a la clase productiva y generadora, odia a las familias mexicanas que tienen prosperidad y aspiran a una vida mejor y más digna, el gobierno de México nos quiere pobres para poder controlarnos”.