Ciudad de México, México.– Con la participación de la especialista en resolución colaborativa de conflictos, conducción y facilitación de procesos de diálogo, construcción de consensos y cambio organizacional, doctora Alejandra Betanzo de la Rosa, el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) inició con la nueva temporada de las Charlas interactivas En Conexión.La plática titulada: “Comunicación No Violenta en el ámbito laboral”, fue presentada y dirigida por la Presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y Derechos Humanos del IECM, Consejera Sonia Pérez Pérez, con la asistencia de la psicóloga Alejandra Zárraga Hidalgo.
En su exposición la Dra. Alejandra Betanzo indicó que la comunicación no violenta es un conjunto de principios, herramientas, habilidades, prácticas y valores relacionados con la comunicación empática, compasiva y efectiva.
Este tipo de comunicación, dijo, se basa en la forma de pensar, usar el poder y en las relaciones humanas. “En ese sentido, es estar consciente de la forma en cómo nos vemos como seres humanos y en cómo nos tratamos”, apuntó.
Expuso que la comunicación no violenta tiene como beneficios conocernos mejor y utilizar las emociones de una forma constructiva, lo que coadyuva a mejorar las relaciones de pareja, como madres o padres de personas jóvenes, en el ámbito laboral o, incluso, en el ámbito político.
“Mejorar la calidad de nuestras relaciones y con nosotros mismos, coadyuva en el manejo de conflictos, de tal manera que todas y todos podemos ganar”, sostuvo.
Agregó que aprender a escuchar a las demás personas de una manera empática, llevará a obtener mayor entendimiento y comprensión mutua, para poder encontrar soluciones para todas y todos.
Afirmó que una de las habilidades que se deben desarrollar para una buena comunicación, es aprender a hacernos conscientes de nuestras emociones y controlar el enojo, rabia, frustración, irritación o miedo.
Por otra parte, señaló que una persona que está en un lugar de liderazgo o poder puede desarrollar la habilidad de la escucha empática, no obstante, dijo que en algunas ocasiones el estar en ese lugar nos deja muchos “puntos ciegos”, lo que impide ponerse en el lugar de las demás personas. Por ello, mencionó que una de las habilidades más importantes es dar voz a quienes regularmente no la tienen y ayudarles a que tengan la confianza de expresarse, buscando la retroalimentación.
Finalmente, sugirió que dentro de los ámbitos laborales se deben realizar reuniones de 10 a 15 minutos a la semana y que cada persona tenga un momento para decir cómo está, cómo le fue en la semana o cómo se siente.
Asimismo, cada una de las personas que juegan el papel de liderazgo, deben reunirse de manera frecuente con cada una de las y los integrantes de su equipo de trabajo para charlar sobre las necesidades personales y laborales.
