Ciudad de México, México.– Desde el punto de vista de sostenibilidad, las pandemias representan una amenaza a la salud y bienestar de los habitantes a nivel global, es necesario considerar que existen límites planetarios, ante ello se requieren estrategias de prevención, afirmó la investigadora del Laboratorio Nacional de Ciencias de la Sostenibilidad de Instituto de Ecología de la UNAM, Marisa Mazari Hiriart.
Al participar en el Foro 20.20, “La Nueva Realidad tras la Pandemia: retos y perspectivas”, indicó que las enfermedades epidémicas se expanden más rápido y causan innumerables muertes, afectan la economía; hasta ahora, su combate ha estado basado en respuestas ante la emergencia sanitaria, con la aplicación de soluciones tecnológicas como las vacunas y diferentes medidas terapéuticas, “cuyo diseño, elaboración y distribución agradecemos, pero tenemos que ir más allá, no solo pensar cómo solucionarlo una vez que sucedió”.
En su exposición “La pandemia como elemento de cambio ante los retos ambientales”, resaltó que ésta es una advertencia sobre cómo nos preparamos para ser más resilientes ante futuros eventos, porque no es la primera ni será la última; una actitud individual es decisiva, pero también nuestra conciencia colectiva, es decir, considerar cómo atender a los menos favorecidos en zonas rurales del país, cómo reformular las políticas públicas y la relación entre ciudadanos y Estado.
En su oportunidad, el director del Centro de Enseñanza para Extranjeros de la UNAM, Alberto Vital Díaz, dijo que la sustentabilidad es fundamental para la superación de las desigualdades y las violencias de género, así como las inequidades relacionadas con la insuficiencia del desarrollo sostenible.
A su vez, el presidente de Fundación UNAM, Dionisio Meade y García de León, afirmó que existe un lenguaje que ya es parte de la cultura de las nuevas generaciones: el cuidado del planeta y mantener mejores hábitos en el espacio ambiental.
Una de las nuevas realidades que se impuso con la pandemia es el cuidado del planeta, ahora hay un gran conocimiento en torno a que la Tierra es nuestra casa común y demanda de una actitud distinta para protegerlo. “Creo que cada vez hay una mayor conciencia de que esto es urgente”.
El director de la Escuela Nacional de Ciencias de la Tierra, José Luis Palacio Prieto, definió a los Geoparques como proyectos educativos que contribuyen a la investigación en la materia y a la enseñanza formal e informal, desde el nivel preescolar hasta el superior. Son 169 en 44 países, la mayoría se encuentra en Europa y sureste asiático.
Durante los trabajos del Foro 20.20, “La Nueva Realidad tras la Pandemia: retos y perspectivas”, también participaron Carol Hernández Rodríguez, integrante del Programa Universitario de Bioética, así como la investigadora de la Universidad de las Américas, Puebla, Celeste Gabriela Cedillo González.