TRAS LA PUERTA DEL PODER:
Por Roberto Vizcaíno
Luego de que André Manuel López Obrador respondiera en una reciente mañanera que la selección del siguiente candidato presidencial de Morena saldrá de una encuesta, y mientras él insiste en que sea por consulta popular, Ricardo Monreal le pidió confiar en él como quien logre consolidar su proyecto de transformación de México.
Roto el diálogo directo de aquellos desayunos en Palacio con atole y tamalitos de chipilín, el zacatecano porfía en convencer al tabasqueño a través de sus entrevistas y conferencias de prensa, es decir, vía los medios informativos, de que él es la opción de Morena en la siguiente sucesión presidencial.
Con este mensaje habló a los medios el sábado a ingresar el acto de toma de posesión de Evelyn Salgado (hija del senador Félix Salgado Macedonio), como nueva gobernadora de Guerrero, acto al que acudió como invitado especial y donde cruzó un abrazo, sonrisas y frases de camaradería con Claudia Sheinbaum como si ambos fuesen ajenos a rencores, dudas, rivalidades y naturales y obvias ambiciones de poder.
Como sea, ese fue el primer escenario donde aparecen ambos, y en el cual Monreal insiste en afirmar que él estará en la boleta presidencial del 2024.
Ahí reiteró sin mucho énfasis que no renunciará a Morena, antes de lograr su objetivo de democratizar los procesos internos de selección de candidatos.
“… lo que estamos peleando es democratizar la designación del candidato y que no haya imposición”, precisó.
La obviedad del destino del mensaje lo indica el hecho de que sólo hay uno que puede realizar esa “imposición” de la que habla el zacatecano. ¿YSQ no?
Con esta consideración Monreal busca la confirmación presidencial deseada, y así convertirse en el sucesor que continúe, dice, el camino que inició el presidente Andrés Manuel López Obrador para transformar al país.
“El mandatario debe tener confianza en el Senado, pues ahí se han apoyado todas las reformas que ha planteado y no ha habido una sola que no haya sido aprobada”, le recordó.
Y eso ha ocurrido, le recordó, a pesar de que con los votos del Grupo senatorial de Morena y de los aliados PT, PES y PVEM, aún se requieren 12 senadores más para alcanzar la mayoría calificada.
Lo cual hace que los proyectos en materia eléctrica, electoral y sobre la Guardia Nacional, dijo: “van a requerir de mucho trabajo, cabildeo, diálogo y consenso con los Grupos Parlamentarios… pero estoy seguro de que lo vamos a lograr”.
Metido de lleno en el diálogo indirecto, Monreal dijo a AMLO que él y todos saben que la transición política iniciada por el tabasqueño hace tres años, tardará algunos más para que se consolide.
Le subrayó que hay resistencias de quienes no quieren que continúe el proceso de transformación o quienes quieren retornar a sus viejos privilegios.
“Hay que tener capacidad de escucharlos, de debatir con ellos, de hacerles ver que lo que estamos haciendo es legítimo y que durante décadas luchamos para llegar aquí, y que trataremos de no cometer los mismos errores que ellos cometieron, para situarnos en un proceso de desarrollo”.
Le recordó igual que la mayoría de las y los integrantes de Morena huyeron de partidos políticos que no permitieron procesos democráticos en la selección de candidatas y candidatos.
“No queremos que Morena se cierre e imponga candidatos”, le insistió.
En este punto le insistió en que el uso de las encuestas como método para la nominación de aspirantes simplemente no es transparente y deja insatisfecha a mucha gente.
Morena debe modernizarlo, buscar uno que acerque a la militancia, y que les dé tranquilidad y certeza a los participantes, agregó.
Concluyó al recordarle igual que la inestabilidad política partidista genera división y de ahí la necesidad de democratizar los procesos internos para mantener una militancia unida, cohesionada y fuerte en torno al Presidente.
Pronto sin duda veremos que responde el aludido…