Ciudad de México, México.– La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, encabezó en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento la ceremonia con motivo de la conmemoración del 210 Aniversario del Inicio de la Independencia de México, donde resaltó la relevancia que tiene en la historia de nuestro país.“Hoy estamos en una situación distinta, compleja frente a la pandemia, pero no por ello, menos emotiva y de reconocimiento de la historia de nuestra patria. Hoy viviendo un momento histórico muy especial en nuestro país, decimos, desde la Ciudad de México: ¡Viva México! ¡Vivan los héroes que nos dieron patria!”, expresó.
La titular del Fideicomiso Centro Histórico, Loredana Montes López, remarcó el liderazgo de las mujeres durante el movimiento de la Independencia de México, quienes apoyaron de diversas formas y su participación marcó un hito para tener un mejor destino en nuestro país como son Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, Gertrudis Bocanegra, María Ignacia Rodríguez conocida como “La Güera Rodríguez” y Mariana Rodríguez del Toro.
“Los trabajos de las mujeres que participaron en la Independencia, en cualquier trinchera estuvieron y están ligados al sostenimiento de la vida de otros y de otras. Resulta notable como parte de las acciones de estas olvidadas de la historia, a quienes yo llamaría más bien “no reconocidas justamente por el discurso histórico”, son siempre actividades que tienen que ver con el cuidado de los otros, las mujeres somos para los otros y de los otros”, puntualizó.
Reconoció la loable participación de Altagracia Mercado “Heroína de Huichapan”, quien reunió dinero y tropas, y se levantó en armas venciendo las huestes españolas; de Catalina Gómez del Arrondo, célebre por su intervención a favor de los Insurgentes, en especial, por haber sorprendido y atacado a un destacamento del Ejército Realista; de María Fermina de Rivera quien fue compañera de armas de los Insurgentes; de Gertrudis Rueda que su batalla fue de resistencia, ya que recibió hostigamiento de las autoridades virreinales por negarse a colaborar con ellas.
María Josefa Martínez, se vistió con ropa de hombre y al frente de los llamados “rebeldes” combatió hasta que fue arrestada y condenada a prisión perpetua en la casa de Las Recogidas, de Puebla; Antonia Nava conocida como “La Heroína de Tixtla”, participó con las armas junto a José María Morelos y Pavón, y lugarteniente de Nicolás Bravo. Ella, junto con doña María Catalán y doña Catalina González -en el intrincado punto de la Sierra Madre del Sur-, ofrecieron sus cuerpos como alimento para los soldados; participó en la entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México en 1821 y murió en marzo de 1843.
María Tomasa Esteves, que hizo labor a favor de los combatientes enfermos y heridos en los primeros años de la Guerra de Independencia y conseguía la información confidencial del Ejército Realista; Carmen Camacho, que persuadía a los hombres del Ejército Realista para que se volvieran Insurgentes y fue culpada de seducción a la tropa realista; Prisca Martina de Ocampo que luchó y combatió en campo por la Independencia.
Manuela Medina “La Capitana” que participó en al menos en siete batallas defendiendo la causa Insurgente; Luisa Martínez, estuvo encarcelada en tres ocasiones por llevar noticias, víveres y recursos a los Insurgentes; María Petra Teruel de Velasco, quien protegió la fuga de Guadalupe Victoria contra Los Iturbidistas; Rita Pérez de Moreno, que cocinaba, repartía la comida y curaba los heridos; y Manuela Herrera, quien quemó su hacienda para que los realistas no encontraran recursos.
También la participación de Rafaela López Aguado, Manuela García de Bustamante, Gertrudis Armendáriz de Hidalgo y Costilla, Carmen de las Piedras de Elías, las hermanas Francisca y Magdalena Godos, Manuela Rosas Taboada, Cayetana Borja, Micaela Montes de Allende, Bárbara Rosas “La griega”, Gertrudis Vargas “La perla de la laguna”, Antonia Peña y alguien a quien apodaron “La Costeña” -simplemente porque nunca se supo su nombre-.
“Las mujeres no siempre han estado en los espacios de la toma de decisiones, que no han ejecutado el poder político que toca al espacio público, eso lo consigna la historia, pero las reivindicaciones a que la actualidad nos impele a hombres y mujeres por igual es precisamente al reconocimiento desde el discurso histórico político vigente, de la trascendencia que las mujeres en su actuar han tenido para que cada etapa de la historia sea”, dijo titular del Fideicomiso Centro Histórico.
Durante la ceremonia cívica estuvieron presentes el presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México, Rafael Guerra Álvarez; y la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, Margarita Saldaña Hernández; así como integrantes del Gabinete Legal y ampliado.
