Jalisco, México.– La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó en su último informe que el consumo de tabaco es la causa del 25% de todas las muertes por cáncer en el mundo.
En México, aunque el consumo de tabaco ha disminuido un 11.4% desde el 2012, según datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018, se calcula que cada año, unas 60,000 personas mueren a causa de enfermedades asociadas con el tabaquismo y es considerado un riesgo para complicar la enfermedad del COVID-19.
En el marco del Día Mundial sin Tabaco, a celebrarse el próximo 31 de mayo, la Dra. Irma Luisa Ceja Martínez, médico especialista en medicina interna y Gerente Médico de Endocrinología y Nutrición de Grupo PiSA, advirtió sobre los efectos negativos del cigarrillo, especialmente durante la pandemia del COVID-19.
“Las personas que son fumadoras tienen mayor riesgo de contagiarse pues el acto de fumar implica el hecho de llevar las manos a la boca constantemente. Además de esto, los fumadores tienen una capacidad pulmonar reducida, mayor riesgo de enfermedad pulmonar crónica, lo que los hace propensos a desarrollar un cuadro más complicado de Covid-19 en caso de adquirir coronavirus”, aseguró Ceja Martínez, quien también es Gobernadora del Capítulo México del Colegio Americano de Médicos (ACP, por sus siglas en inglés).
La especialista en medicina interna agregó que debido a que el tabaquismo altera la función pulmonar, hay mayor riesgo de adquirir infecciones respiratorias. “En la enfermedad por COVID-19 se ha correlacionado el tabaquismo con mayor riesgo de requerir ventilación mecánica y de necesitar terapia intensiva en caso de ser contagiado”, señaló.
Este año, la OMS ha hecho un llamado a la acción para evitar que las nuevas generaciones de niños y jóvenes se enganchen en el consumo de tabaco, pidiendo a líderes de opinión, celebridades y personas influyentes, que no promuevan el consumo de tabaco ni de vaporizadores de nicotina.
“El hecho de que un aparato no saque humo, no significa que no es igual de dañino o incluso más que un cigarro convencional. Los cigarrillos electrónicos contienen nicotina, sustancia encontrada en el tabaco que es altamente adictiva y otros componentes químicos que son tóxicos”, dijo la especialista en medicina interna.
La ENSANUT 2018 reveló que cada vez aumenta más el número de personas que empiezan a consumir tabaco a temprana edad. En nuestro país el porcentaje del consumo de tabaco en niños y jóvenes de entre 10 y 19 años es de un 5.1%, muy cercano al consumo en las mujeres mayores de 20 años que representa el 5.9%, mientras que en los hombres este número se estimó en un 7.5%.
“Si se es fumador, este es el mejor momento para decidirse a dejarlo, pues no sólo supone un mayor riesgo para infectarse con coronavirus y desarrollar una enfermedad grave, el cigarrillo está asociado a padecimientos vasculares, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), cáncer en diferentes órganos, osteoporosis y también tiene efectos negativos en la salud e higiene personal como mal aliento, dientes amarillos, envejecimiento prematuro además de bajar nuestros mecanismos de defensa”, agregó la ex presidente de la Asociación Jalisciense de Médicos Internistas.
A pesar de que en la actualidad la mayoría de las personas conocen los graves daños que el consumo de tabaco ocasiona en la salud, el tabaquismo persiste. En México, los fumadores mayores de 20 años, consumen en promedio 7.1 cigarrillos al día. Cifras compartidas por la OMS, estiman que en el 2030 el consumo del cigarrillo ocasionará la muerte de ocho millones de personas al año por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco.
La buena noticia es que siempre es buen momento para dejar de fumar, de acuerdo a OMS, 12 horas después de haber consumido el último cigarrillo, los niveles de monóxido de carbono en el organismo se normalizan. Más adelante, entre las 2 y 12 semanas, se puede observar una mejoría en el sistema circulatorio y mejora la función pulmonar.