Urzúa, el cazador de euforias sin fundamento de AMLO

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Decrecimiento
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Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

El sábado termina noviembre y con ello el primer año formal del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Sabemos que el domingo primero ofrecerá en el Zócalo un informe más de su gestión. Seguro será una repetición de lo que dicho en plazas públicas del país y en sus mañaneras.

Como todos los presidentes anteriores dirá que va requeté bien, y que hoy en México bajo su mandato todo es felicidad.

Yo se poco de economía, pero escucho y leo que economistas experimentados dicen que ciertamente AMLO salva la sexta parte de su mandato sin recesión y sin devaluación graves, y con la macroeconomía a salvo.

Pero una que sí sabe de eso y que además estuvo como puntero del sector económico y financiero de AMLO, Carlos Urzúa, advierte:

“… la economía no está técnicamente en recesión, aunque sí al borde del precipicio

Bajo esa óptica, la situación económica es aún más preocupante”.

Y aclara por qué lo dice:

“En efecto, el PIB registrado entre enero y septiembre de este año es virtualmente idéntico al registrado en esos mismos nueve meses de 2018 (o sea, que pese a lo prometido y constantemente reiterado por ya saben quien, lo alcanzado por López Obrador es igual que lo hecho por Enrique Peña Nieto).

Es decir, la economía experimenta literalmente un estancamiento. Y dado que sólo quedan por contabilizarse los últimos tres meses, no es muy aventurado conjeturar que el crecimiento del PIB en 2019 acabará oscilando entre un 0.2% y un -0.2%”.

¡Vaya chasco!

Pero lo advertido y señalado por Urzúa no queda ahí. Los persistentes e ineludibles datos de la realidad indican que junto con el país gobernado por el tabasqueño los estados también se hunden en números verdaderamente preocupantes.

Para constatarlo recurre a los reportes de Inegi.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicó recientemente las cifras preliminares sobre el Producto Interno Bruto (PIB) nacional del tercer trimestre del año.

“En tres semanas se publicarán las cifras finales, pero las estadísticas oportunas, como las llama el Inegi, tienden a ser muy cercanas a las definitivas. Ya tenemos, pues, información acerca de cómo se comportó la economía en los meses de julio, agosto y septiembre.

Y, lamentablemente, las noticias son malas.

“Comencemos con las comparaciones entre trimestres consecutivos. Como reportó con anterioridad el Inegi, el PIB del primer trimestre del año cayó 0.2% respecto al del último trimestre de 2018, y el del segundo trimestre creció mínimamente, 0.02%, respecto al del primer semestre. Ahora el Inegi estima que el PIB del tercer trimestre creció respecto al segundo con una tasa de 0.1%. Así pues, como los tres últimos cambios porcentuales fueron -0.2%, 0.02% y 0.1%, la economía no está técnicamente en recesión, aunque sí al borde del precipicio”.

En este punto Urzúa, quien renunció a continuar dirigiendo la secretaría de hacienda del gobierno de la 4ta Transformación ante la perspectiva del desastre, explica que es mejor comparar los datos del PIB acumulados y sin el ajuste estacional, los cuales también son reportados por el Inegi.

“… si la economía nacional está estancada y las economías de algunos estados están visiblemente creciendo, tiene que haber otros estados que estén en una franca recesión económica.

“Para examinar esto puede utilizarse el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) que publica también el Inegi. Pero antes de compartirle las últimas cifras del ITAEE es necesario señalar dos de sus defectos:

“Primero, (que) el estimado final del PIB de cada estado para el año de 2019 no se va a conocer hasta mediados de diciembre de 2020. De hecho, al día de hoy las cifras más recientes del PIB estatal corresponden al año 2017.

“El segundo punto es que los cambios porcentuales que serán mencionados a continuación corresponden a la comparación de las cifras del indicador registradas a fines del segundo trimestre de 2018 con las registradas para junio de este año.

“Ahora sí entramos de lleno a los datos.

“De acuerdo con el ITAEE, los 14 estados que han registrado un crecimiento económico fueron (los números en paréntesis son los cambios porcentuales): Tlaxcala (4.1), Chihuahua (2.8), Colima (2.8), Durango (1.6), Nuevo León (1.5), Aguascalientes (1.4), Baja California (1.1), Jalisco (1.0), Nayarit (1.0), Tamaulipas (1.0), Coahuila (0.5), Quintana Roo (0.4), Yucatán (0.2) y Veracruz (0.1).

“Quizás no es sorpresivo que, dada su mayor vocación exportadora, en el grupo anterior se encuentren cinco de los seis estados que colindan con territorio estadounidense.

“Por otro lado, las 18 entidades donde se registraron caídas fueron: Sonora (-0.4), Querétaro (-0.5), San Luis Potosí (-0.9), Morelos (-0.9), Sinaloa (-1.0), Ciudad de México (-1.3), Guerrero (-1.4), Guanajuato (-1.4), Puebla (-1.6), Michoacán (-1.6), Oaxaca (-2.6), Campeche (-2.6), Estado de México (-2.7), Hidalgo (-2.9), Zacatecas (-3.4), Chiapas (-3.8), Baja California Sur (-7.5) y Tabasco (-10.3). No es tan sorpresiva la caída en el caso de la Ciudad de México, dado el actual deterioro de su sector de la construcción. Un tanto más sorprendente es la significativa contracción económica de la segunda entidad que más aporta al PIB nacional, el Estado de México.

“Pero todas esas cifras palidecen cuando se las compara con las recesiones que actualmente padecen Baja California Sur y Tabasco”.

¿Cuánto más va a durar México al filo del precipicio? El doctor Urzúa no lo adelante, sólo indica que estamos casi en el despeñadero.

Eso cuanto termina el primer año de Gobierno de AMLO y el arranque del segundo de 6.

A ver que nos dice el próximo domingo desde el Zócalo.

MIENTRAS LA VIDA SIGUE

 

Donde la realidad no se detiene es en el legislativo. En la cámara de Diputados a Mario Delgado, coordinador del grupo de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política le espera un chaparrón porque se le ocurrió circular en redes sociales un video a bordo de un autobús que lo trasladó junto a otros diputados al centro Bancomer de Santa Fe, en el que se burla al decir:

“¿Y qué creen? Que los panistas no van a venir… porque no va a haber moches”.

El dicho fue luego coreado por todos en el bus.

El comentario cayó pésimo entre los panistas y el resto de las oposiciones. No es esa la actitud que se espera del principal negociador del Gobierno de AMLO en San Lázaro, afirman en PAN, PRI, PRD y MC, quienes afilan sus machetes para recibir mañana en el pleno a Delgado.

Enfrente, en el Senado, Ricardo Monreal parece que ya logró bajarle a la confrontación de los suyos con el PAN y del PAN a continuar con las descalificaciones por el tema de la designación de Rosario Piedra como presidente de la CNDH.

El zacatecano advierte que hay muchos temas importantes en que orientar ahora el esfuerzo común: viene la eliminación del fuero, la condonación de impuestos y la controvertida remuneración de los servidores públicos para que nadie gane más que AMLO.

En las siguientes 3 semanas deberán sacar adelante 3 reformas constitucionales, 4 reformas legales y 8 nombramientos importantes.

No hay, pues, tiempo para pleitos, indica.