Ciudad de México, México.– El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), y los ministerios del ramo de ocho países centroamericanos, firmaron un acuerdo para contar con una Estrategia Integral que permita “posicionar el café de la región de Mesoamérica, Caribe y Andina en los mercados mundiales y, por ende, la obtención de precios más justos y competitivos del grano”.
En el marco de la Reunión Agricultura-Relaciones Exteriores con el Consejo de Ministros de Agricultura del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA)-Consejo Agropecuario Centroamericano (CAC), encabezada en esta capital por el secretario Víctor Villalobos Arámbula, se establecieron los siguientes puntos de acuerdo:
- Construir una alianza regional para la gestión de precios y posicionamiento de nuestro café, a fin de que nos represente y permita diseñar y ejecutar acciones en beneficio de nuestra caficultura.
- Fortalecer esta alianza con las iniciativas de Colombia y del SICA, así como con otras acciones que tengan como objetivo este fin común.
- Desarrollar un “Programa de Comercialización” eficiente y garante de calidad que jurídicamente de certidumbre a todas las partes.
- Implementar un Programa de Cooperación Técnica Regional que contribuya a mejorar la productividad del sector e incidir en una mayor rentabilidad y bienestar social y económico de los productores de café.
- Instrumentar un Programa de Promoción de Incremento al Consumo del Café MesoAndino, tanto en los países productores como hacia mercados emergentes.
- Establecer un punto focal por país e incluir en la agenda de las reuniones que se celebren en la región MesoAndina un apartado para dar seguimiento formal al tema del café.
En el evento, que tuvo lugar en la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores, el titular de la Sader señaló que este importante inicio deberá llevar a conseguir un precio más justo y competitivo para el café de la región, y que esto se convierta en factor para el desarrollo económico y social, con efectos en la disminución de la migración de las personas.
Puntualizó que habrá que dar un nuevo mandato al Programa Cooperativo Regional para el Desarrollo Tecnológico y Modernización de la Caficultura (PROMECAFE, que aglutina a los países de la región), ante los nuevos retos que se enfrentan.
Habrá que modificar y ajustar nuestras propias instituciones y los instrumentos que sostenemos económicamente, apuntó.
Destacó que esta iniciativa de crear un mecanismo que incida en un mejor desarrollo de la caficultura, y en los precios, surge de las reuniones bilaterales entre México y países de Centroamérica en eventos internacionales, y se concreta en seguimiento a lo propuesto en XVII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla, realizada hace unas semanas en San Pedro, Sula, Honduras. Se sustenta, acotó, en defender la alta calidad y especialidad del grano en la región.
El acuerdo fue firmado por los ministros de Agricultura de Costa Rica, Renato Alvarado; El Salvador, Pablo Anliker (también Presidente Pro Tempore del CAC); Guatemala, Mario Méndez; Honduras, Mauricio Guevara; México, Víctor Villalobos, y Nicaragua, Edward Centeno, así como por los representantes de Belice, Andrew Harrison; Panamá, Carlos Motta, y República Dominicana, Leandro Mercedes.
Los ministros reconocieron el liderazgo y la voluntad de cooperación del Gobierno del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para impulsar el desarrollo de la región mediante la integración de acciones en el ámbito agropecuario, y detonar bienestar en las comunidades rurales de los países participantes.
Propuesta mexicana, punto de partida
Antecedió al acuerdo logrado, la presentación de la Propuesta para la Atención Integral del Café de la Regiones de Mesoamérica, El Caribe y Andina, elaborada por un equipo de expertos de la Sader y expuesta por el subsecretario de Agricultura, Miguel García Winder, quien desglosó acciones a realizar enmarcadas en cuatro ejes: Político, comercial, productivo y fortalecimiento del consumo.
En el renglón político, subrayó la importancia de lograr que el café MesoAndino sea “descomoditizado” y logre reconocimiento “como un café que comanda precios especiales”. Así también, resaltó la necesidad de fortalecer la participación y posición de los países de este bloque en la Organización Internacional del Café (OIC), además de lograr posiciones de liderazgo en el Foro Mundial de Productores de Café.
En la parte comercial, se refirió a establecer un sistema regional de información sobre la cadena café; desarrollar mecanismos jurídicos que garanticen volumen, calidad y oportunidad a productores y compradores, y generar un cabildeo permanente ante las bolsas e industria para asegurar que los productores logren un precio justo, por encima de los costos de producción.
En el eje productivo, hizo énfasis en fortalecer y promover el desarrollo de nuevos materiales genéticos, así como los programas de alerta temprana y fitosanitarios nacionales y regionales.
Finalmente, en lo que respecta al consumo, que registra un indicador per cápita en la región de 1.60 kilogramos, con una población aproximada de 263.4 millones de personas –lo que equivale a siete millones de sacos—, propuso establecer programas nacionales de promoción de consumo de café, promover la participación en eventos de alta calidad, como el de Taza de Excelencia, y evaluar la viabilidad de establecer un sello distintivo para el café de la región.
A lo largo de la propuesta, se destacan también los beneficios esperados para el ambiente, como son: Reducción de daños, mejora en el uso de suelo y agua, así como la obtención de paisajes sostenibles.
Finalmente, como pasos siguientes a la conformación del bloque de países “MesoAndinos”, se propone alinear las prioridades domésticas y la cooperación nacional e internacional, definir responsabilidades y crear un “plan de negocios”, así como establecer un programa de seguimiento y evaluación de impacto.
En el evento participaron también el director general del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Manuel Otero; el representante de este organismo en México, Diego Montenegro; el director Ejecutivo del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), Efraín Medina, y el director General del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE), Muhammad Ibrahim, así como el secretario Ejecutivo del CAC, Roberto Harrison.