Ciudad de México, México.— A nivel mundial hay 2.1 billones de personas sin acceso a servicios de agua potable, 4.5 billones carentes de servicio de saneamiento seguros y 340 mil niños menores de cinco años mueren anualmente por enfermedades diarreicas, reconocen la Organización Mundial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en el marco de Semana Mundial del Agua.
Aquí en la capital del país, se celebra esa semana con el lema “agua para la sociedad: incluidos todos, entre el 25 y 30 de agosto un llamado internacional para impulsar el cuidado y aprovechamiento sustentable del agua.
A nivel internacional ese foro anual es organizado por el Instituto Internacional de Agua, con sede en Estocolmo, Suecia, donde se reúnen miles de expertos de todo el mundo para analizar y proponer soluciones a los problemas hídricos más graves del planeta.
Este instituto apoya proyectos e investigaciones y publica informes con las conclusiones, que brindan recomendaciones para atender los problemas actuales y futuros del agua y el medio ambiente en general, además, aborda temas de gobernabilidad y de desarrollo humano relacionados con el uso del agua potable.
Conforme a cifras de la Organización Mundial de la Salud y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, existen 2.1 billones de personas que carecen de acceso a servicios de agua potable, 4.5 billones que carecen de servicios de saneamiento seguros y 340 mil niños menores de cinco años que mueren anualmente por enfermedades diarreicas.
En julio de 2010, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas reconoció el derecho de todas las personas al agua y al saneamiento. Estableció que cada persona debería tener acceso seguro a una cantidad suficiente de agua para uso doméstico, de entre 50 y 100 litros de agua al día, con un costo que no supere 3 por ciento de los ingresos familiares.
En la Ciudad de México, el derecho al agua está garantizado en la Constitución local, que en su artículo 9, establece que “toda persona tiene derecho al acceso, a la disposición y saneamiento de agua potable suficiente, salubre, segura, asequible, accesible y de calidad para el uso personal y doméstico de una forma adecuada a la dignidad, la vida y la salud; así como a solicitar, recibir y difundir información sobre las cuestiones del agua”.
Asimismo, define que “la ciudad garantizará la cobertura universal del agua, su acceso diario, continuo, equitativo y sustentable. Se incentivará la captación del agua pluvial. El agua es un bien público, social y cultural. Es inalienable, inembargable, irrenunciable y esencial para la vida. La gestión del agua será pública y sin fines de lucro”.
Problemática y retos del agua en la Ciudad de México
En la Ciudad de México la problemática hídrica es compleja, permanente, creciente y desigual. El principal problema es la escasez de agua en la zona oriente, que empieza a padecerse en las zonas centro y norte, donde además se sufren inundaciones en la temporada de lluvias.
El agua que se utiliza en la capital proviene en dos terceras partes de aguas subterráneas y en una tercera parte de los sistemas Lerma y Cutzamala. La falta de agua en la capital tiene como causas el crecimiento poblacional y la sobreexplotación del acuífero, ya que por cada litro que se recarga se extrae casi el doble -una pérdida cercana a los 600 millones de metros cúbicos anuales-, lo que origina un alarmante hundimiento diferenciado, que rompe tuberías y drenajes.
La escasez de agua se agrava por la gran cantidad de fugas que se presentan en la red de agua capitalina, que es antigua y con poco mantenimiento.
Otro aspecto importante dentro de la problemática hídrica, es la enorme desigualdad en la dotación y el consumo de agua que se presenta en la capital, donde hay zonas de altos recursos económicos que utilizan más de 750 litros por persona al día y simultáneamente, personas que habitan en colonias populares que cuentan con sólo 30 o 40 litros diarios.
Propuestas de la diputada Ana Patricia Báez desde el Congreso local
“En la Ciudad de México se desperdicia 35 por ciento del agua en fugas de drenaje. Es tiempo de que cambiemos, de que como gobierno empecemos a realizar acciones, a presentar más puntos de acuerdo, más iniciativas en favor del agua, y cambiar los sistemas para captación de agua pluvial”, propuso la diputada Ana Patricia Báez.
La legisladora de la fracción parlamentaria del PAN e integrante de la Comisión de Gestión Integral del Agua recordó que presentó una iniciativa en el Congreso capitalino para la creación de jardines infiltrantes, “donde podamos captar toda el agua de lluvia que cae, que anualmente son miles de millones de metros cúbicos, y poderla reutilizar”.
Asimismo, expuso otra iniciativa propuesta por su grupo parlamentario para instalar en todos los edificios de gobierno mingitorios secos, que representarían un importante ahorro de agua para la ciudad. “Si queremos la continuidad de la vida como la tenemos hoy en día en la ciudad y el país, tenemos que cambiar la cultura y valorar el cuidado del agua”, concluyó la diputada Báez.
El programa Cosecha de Lluvia en la Ciudad de México
Cosecha de lluvia es un programa de captación de agua pluvial que impulsa la Secretaría del Medio Ambiente capitalina en coordinación con la agrupación Isla Urbana, que tiene como meta instalar gratuitamente 100 mil sistemas, cada uno de los cuales permite que un hogar sea autosuficiente en materia de agua potable por entre seis y ocho meses del año, sin la necesidad de recibir agua de fuera para cubrir sus necesidades.
Isla Urbana es un proyecto de emprendimiento social que surgió en 2009, enfocado principalmente al desarrollo e instalación de sistemas de captación de agua de lluvia, como una solución tecnológica viable para abordar la crisis de agua en la capital, aprovechando que en esta ciudad anualmente caen en promedio 750 litros de agua de lluvia por cada metro cuadrado de superficie.
“El hecho de que vivamos en una ciudad, por un lado con tanta precipitación de lluvia, y que se está quedando sin agua, pero que por el otro, se inunda continuamente, nos hizo creer que la cosecha de lluvia podría aportar algo de valor a resolver el problema del agua”, explicó Enrique Lomnitz, cofundador y director general de Isla Urbana.
Recordó que en 2009 colocaron su primer sistema de captación de lluvia en un hogar de la colonia Cultura Maya, en la zona del Ajusco, y que en 10 años han instalado 15 mil sistemas, la mayoría en la Ciudad de México. Gracias al programa que impulsan con Sedema, han colocado más de cinco mil sistemas en menos de cinco meses, que en conjunto permiten captar cada que cae un aguacero el equivalente a 600 pipas.
“Esta es la visión de ciudad que queremos impulsar, una ciudad en la que cuando cae un aguacero se llenan las cisternas, y toda esta agua que ahorita se va al drenaje, la aprovechemos y podamos vivir con esta agua en nuestras casas, principalmente en las zonas de la ciudad que están sufriendo porque no tienen suficiente agua”, adelantó.
Labor del Consejo Consultivo del Agua
El Consejo Consultivo del Agua se creó en el año 2000 para generar conciencia entre la comunidad y promover el cambio de hábitos cotidianos para un mejor consumo del agua. Recientemente se ha enfocado en promover leyes que mejoren la eficiencia en el uso del agua y consolidado como un órgano de consulta para los gobiernos a nivel nacional.
Jorge Fuentes, coordinador de proyectos de esta institución, explicó que la ciudad se encuentra entre las 10 del mundo catalogadas como de estrés hídrico en el futuro.
“Hay estimaciones que señalan que para el año 2050 sufrirá de grave escasez de agua, de manera generalizada en todas las zonas del oriente. Actualmente ya tenemos esa problemática en Iztapalapa y en el sur, en Tlalpan, donde la población no tiene garantizado el acceso al agua 24 horas al día los siete días de la semana”.
“La capital, al ser una de las grandes ciudades del mundo, consume diariamente grandes cantidades de agua. El cálculo establece en el equivalente a 382 Estadios Azteca llenos de agua lo que se consume diariamente, para dotar de agua a una población creciente y a una comunidad flotante que diariamente visita la Ciudad de México”, indicó.
Fuentes Martínez adelantó que en breve el CCA lanzará en la Ciudad de México la campaña Agua de mi corazón, con la que se promoverá el cambio de hábitos entre la ciudadanía para un uso eficiente del agua; mientras que a nivel nacional e internacional se impulsará el rescate ambiental y la promoción turística del lago más grande del país, el Lago de Cuitzeo, ubicado entre Michoacán y Guanajuato.
