Ciudad de México, México.– El grupo parlamentario del PRD solicitó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que libere a la brevedad el recurso presupuestado para este año al sector salud, pues el “arbitrario recorte de dos mil 400 millones de pesos a su gasto agudizó su crisis y lo puso al borde de la emergencia”.
“Con el pretexto de la austeridad y el combate a la corrupción, numerosos institutos, hospitales, clínicas y otros inmuebles no tienen para pagar servicios básicos, insumos, equipos, personal, y no pueden atender a los pacientes”, dijo en un comunicado.
A través de una propuesta de punto de acuerdo, la bancada perredista solicitó a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión que la SHCP libere a la brevedad los recursos asignados este año al sector salud y que se instale un grupo de seguimiento a las negociaciones entre el gobierno federal y las personas que se han manifestado por esta situación.
“Para el Partido del Sol Azteca, la emergencia ya es patente en institutos como el de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y el Mexicano del Seguro Social (IMSS), por lo que la situación, si no se atiende como se debe, podría derivar en una bomba de tiempo”, dijo en el comunicado.
En varios inmuebles del sector no hay para sufragar electricidad, agua, mantenimiento, medicamentos ni equipamiento y, en consecuencia, por ejemplo, tampoco se pueden proporcionar cirugías de alta especialidad, ni curaciones elementales o incluso aplicar vacunas.
“Todos los niveles de atención tienen problemas por falta de recursos, personal e infraestructura, a grado tal que la atención primaria bien podría denominarse de atención precaria”, puntualizaron los legisladores del PRD.
Indicaron que la crisis es generalizada, pues abarca a 11 institutos nacionales y hospitales federales que carecen de recursos para pagar electricidad, mantenimiento de equipo médico y el mantenimiento en general.
Aunado a ello –precisaron los diputados perredistas– se reportan problemas más graves por reducción de cirugías de alta especialidad, atención a niños con cáncer, limitación en el número de trasplantes, rezago en las cirugías programadas y falta de personal en áreas sustantivas.
“La problemática ya se extendió a los sistemas hospitalarios de ocho estados, los cuales enfrentan escasez de personal y desabasto de medicinas. De hecho, a pesar de las promesas del gobierno federal, la falta de medicamentos sigue sin resolverse”, agregaron.
En protesta por esta situación -derivada en gran medida de la reducción presupuestal-, médicos, enfermeros y trabajadores del sector salud se manifiestan en diversas entidades de la República.
Una de ellas fue la de la Asamblea Mexicana de Médicos Pasantes en Servicio Social, el 1º de agosto, quienes rechazan la reducción presupuestal y su impacto en disminución de salarios, becas, prestaciones, plazas, promociones en el escalafón y recursos a universidades; todo ello repercute en mal servicio a la población.