Ciudad de México, México.— La Ciudad de México se hunde entre 8 y 12 centímetros cada año sin que las autoridades responsables hagan nada para frenarlo, dijo la diputada federal morenista, Adriana María Guadalupe Espinosa de los Monteros García.
Por ello, planteó exhortar al Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) y a la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y de Protección Civil del Gobierno de la Ciudad de México, a que emprendan acciones preventivas respecto de la subsidencia, hundimientos y fracturamientos en la capital del país.
En un punto de acuerdo que analiza la Primera Comisión de la Permanente, resalta que por su ubicación geográfica y la extracción excesiva de agua de acuíferos, la Ciudad de México registra cada año hundimientos de entre 8 y 12 centímetros, lo que implica “riesgo que no es de corta duración”, sino un proceso prolongado y causa afectaciones graves a infraestructura, patrimonio cultural, artístico y a la población en general.
Hasta 2017, la Ciudad de México tenía 12 sitios con deformación crítica, ubicados en las alcaldías de Iztapalapa, Iztacalco, Tláhuac, Cuauhtémoc, Benito Juárez y Xochimilco, con agrietamientos y hundimientos acelerados de hasta 40 centímetros anuales.
Por ello, Adriana Espinosa consideró impostergable que el Cenapred refuerce los trabajos que apoyen la gestión del riesgo en aquellas zonas donde se presenta la mayor cantidad de inundaciones, hundimientos y grietas.
Recordó que, en 2018, autoridades de la alcaldía de Tláhuac informaron que a causa de una fuga de agua se registró un socavón de diez metros de diámetro en la carretera Tetelco-Tecómitl.
De ahí, dijo, la necesidad de revisar los trabajos del Sistema Nacional de Protección Civil en la obtención de una cartografía de la subsidencia de la Ciudad de México que permita detectar las zonas vulnerables y dote de herramientas para la toma de decisiones.
La integrante de la Comisión de Desarrollo Metropolitano, Urbano, Ordenamiento Territorial y Movilidad argumentó que la falta de estudios científicos que acompañen la administración pública y la toma de decisiones se refleja en la nula actualización de los Atlas de Riesgo en los ámbitos municipal, estatal y federal, como lo establece el artículo 19, fracción XXII, de la Ley General de Protección Civil.
Añadió que el Cenapred es el órgano técnico científico de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) que se encarga de crear, gestionar y promover políticas públicas en materia de prevención de desastres y reducción de riesgos, por medio de la investigación, monitoreo, capacitación y difusión de información.
En tanto, el Sistema Nacional de Protección Civil sentó las bases para la atención de desastres e institucionalizó la protección civil dentro de los esquemas de actuación de la administración pública. En él se observan tres modelos que transitan de la atención a la prevención y a la transferencia de riesgos al adoptar distintos instrumentos, como el Fondo de Desastres Naturales, el Fondo para la Prevención de Desastres Naturales y los bonos catastróficos, cuyo propósito es lograr una gestión administrativa del riesgo.
De acuerdo con la Ley del Sistema de Protección Civil del Distrito Federal, el artículo 16 numeral I faculta a la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y de Protección Civil a coordinar y supervisar que la operación y acciones de los integrantes del sistema cumplan con los fines en esta materia.