Ciudad de México, México.— El proyecto del Tren Maya se ha modificado casi el 70 por ciento por observaciones de ambientalistas, de octubre del 2018 a la fecha, aseguró el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Campeche (Semarnatcam), Roberto Iván Alcalá Ferráez.
Asimismo, sostuvo que este proyecto “abre una gran oportunidad de derrama económica” para los estados que conectará, que son Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo; rechazó que la construcción de la vía del tren genere algún impacto negativo al medio ambiente, debido a que se realizará, en su mayoría, en zonas ya trazadas”.
En conferencia de prensa encabezada por la presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, Sustentabilidad, Cambio Climático y Recursos Naturales, Beatriz Manrique Guevara (PVEM), el funcionario comentó que “la zona que se va a construir pasa por toda la selva de Campeche y Quintana Roo, lo demás ya está construido, es simplemente repararlo y darle espacio suficiente”.
“Les podría decir que los incendios forestales anuales, generan mayor impacto que lo que va a provocar al Tren Maya”, manifestó Alcalá Ferráez.
El problema será “que no haya la especulación en los predios, para que el gran capital no llegue y arrase” con el comercio de la zona.
Afirmó que se encuentran preparando un modelo de gobernanza y “estamos creando los organismos para poder discutir todos los temas del Tren Maya”.
Además, se tienen “que establecer las capacidades de carga que tiene la selva para poder atender a estos turistas, que pretenden llevar por medio del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) a estas entidades”.
“El Tren Maya es una oportunidad de conexión; esto lo que abre, es una gran oportunidad de derrama económica que necesitamos para desarrollarnos y para poder utilizar los puertos de la península, para exportar los productos que tenemos”, destacó.
Puntualizó que actualmente Puerto Progreso (Yucatán) y Playa del Carmen (Quintana Roo), “son puertos importantes que no tienen comunicación ferroviaria”.
Alcalá Ferráez subrayó que “desde el primer proyecto que como autoridad ambiental conoció, “en octubre del año pasado, al que ahora se va a licitar, se ha modificado casi en un 70 por ciento, considerando las opiniones de todos los ambientalistas. Queremos que se haga, pero bien”.