Por Javier Ramírez
En materia de seguridad pública ha habido mucho ruido y pocas nueces como dice el dicho popular, de parte de las autoridades federales, estatales y municipales, y del mismo Congreso de la Unión, pues ese problema lo sufren y padecen, día a día, casi la mayoría de los 129 millones de mexicanos a manos de la delincuencia organizada o común que campea por todo el territorio nacional sin que ninguna autoridad, por complicidad o incapacidad, los ponga en orden.
Entre gobiernos federal, estatal y municipal y el legislativo no se hace esperar la ficción debido a que todos se echan la culpa de los malos resultados y en el caso del legislativo, Morena como oposición se oponía a que elementos del ejército hicieran el trabajo de las policías federales, locales y municipales, y ahora con el cambio de estafeta, los priístas, panistas y perredistas se oponen. Ficción pura, aunque el problema de inseguridad es real.
Y todo va en contra de las autoridades en la materia: muertos, desaparecidos, heridos, venta de drogas a lo largo y ancho del territorio nacional, daños al patrimonio de la población con presupuestos billonarios y sin resultados.
En ese transitar de los años, los gobiernos panistas de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón junto con el priísta, Enrique Peña Nieto de plano fracasaron en la materia, pues a pesar de que sacaron a las calles a las fuerzas armadas con flagrante violación a la Constitución por más de 18 años, el problema ha seguido creciendo.
En esos ensayos de brindar seguridad pública a la población con Peña Nieto se procesó, legisló y público el 21 de diciembre de 2017 la ley de seguridad interior que intentó normar a las fuerzas armadas en materia de seguridad pública en las calles. Sin embargo, ante la impugnación social en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ésta determinó eliminar esa norma por anticonstitucional, porque, según su apreciación, el legislativo confundió la seguridad interior, la seguridad nacional y la seguridad pública.
Ahora tocará el turno al gobierno de Andrés Manuel López Obrador en esta materia. Prometió en campaña regresar a los cuarteles a los soldados, y ahora dice que seguirán en las calles, porque los más de 40 mil elementos de la Policía Federal, no están preparados para atender el problema. Por eso propuso crear la guardia nacional con elementos de formación y mando operativo militar, aunque, según la aprobación de la norma, el mando será civil.
En caso de que a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, organismos internacionales, partidos políticos de oposición y organizaciones civiles se inconformen ante la SCJN, pues otras vez se podría invalidar la norma, mientras la delincuencia seguirá haciendo de las suyas como hasta ahora.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, reconoció que la mayoría de los elementos de la Policía Federal cumplen tareas administrativas, pese a que la seguridad pública es uno de los problemas que aquejan a la población.
Mientras tanto, llama poderosamente la atención que elementos de la Policía Federal y la local en la capital del país saben en dónde están los puntos críticos de la inseguridad. Como ejemplo, uno de los lugares más inseguros en Iztapalapa, en donde campea la inseguridad y atracos en contra de la población, es el paradero y terminal del Metrobús y estación Tepalcates. Últimamente, camionetas de la primera corporación han hecho acto de presencia para inhibir a los delincuentes, pero una vez que se van es china libre para la delincuencia.
Los mismos efectivos policiacos también saben que en toda la calzada Ignacio Zaragoza, se suben delincuentes atracar a los usuarios de los micros y transportes de pasajeros como autobuses, y todo queda en la impunidad.
Mientras los especialistas opinan que no es un asunto de dinero el tema de seguridad pública, como Martín Barrón que lo ha declarado: los gobiernos podrán seguir con aumentos hasta de 1 mil por ciento, pero la inseguridad seguirá al alza.
“No es un asunto de gasto. Es el modelo policial con el que se cuenta es inconstitucional”. Y se podría agregar que el número de efectivos policiacos ha disminuido. Sin embargo, en el gobiernos de Peña Nieto, se calcula que su estrategia de seguridad nacional y seguridad pública costó casi 1.5 billones de pesos entre 2013 y 2018.
Pese al millonario desembolso, México es actualmente el país con mayores índices de violencia e impunidad en el continente americano, con más de 90 homicidios dolosos al día (tasa que se alcanzó los primeros meses de este año).
Las cifras de los delitos en el país son de horror. En los sexenios de los presidentes Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto sumaron 234 mil 996 homicidios dolosos hasta octubre de 2017, cuyo mes se calificó como el más violento del año que se tenga registro.
En el marco de la creación de la guardia nacional que pidió López Obrador y que está por aprobarse, el diputado y vicecoordinador morenista, Pablo Gómez, admitió que el sistema mexicano de seguridad pública colapso, no tiene remedio, hay que desecharlo y crear otro, y eso es lo que estamos discutiendo cuál creamos.
“Lo vamos hacer por partes, vamos a hacer un rompecabezas y luego a unir las partes con políticas sociales, trabajo, salario, desarrollo social, educación, becas, también policía, ministerio público”.
Se le pregunta: ¿qué falló?
“Todo”
Y el dinero se fue a la basura, billones de pesos?
“Así es”, respondió y se fue el legislador morenista.
Por su parte, Carlos Romero Hicks, líder parlamentario panista en San Lázaro, justificó que se oponen a la militarización de la seguridad pública, porque su vocación es el reguardo del territorio nacional cuando le mencionó que ellos sacaron al ejército a las calles y la oposición se oponía y ahora ustedes hacen lo mismo.
Cuando se le menciona también que no se ponen de acuerdo los diferentes grupos parlamentarios para legislar para que el Ejército participe en seguridad pública y que la misma Corte echó para atrás la ley general de seguridad interior para normar la presencia de las fuerzas armadas en las calles
Cuando se le menciona que se ha violado la Constitución durante 18 años por la presencia de los elementos castrenses en las calles, desde el panista Vicente Fox y Felipe Calderón y el priísta Peña Nieto, respondió:
“Y dice AMLO que los militares no regresan a los cuarteles, es una contradicción que tenemos que aclarar”.
¿Y hacía dónde vamos en materia de seguridad pública?
“Es crear el modelo de seguridad, ese es la gran reto”.
Entrevistado sobre la inseguridad pública, el presidente de la Conago y gobernador de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, dijo que “hay que ir fortaleciendo todo y cada uno de los tema de seguridad, mejorando, tener mayor inversión, infraestructura, más capacitación”.
Para el mandatario campechano en materia de seguridad “ha habido aciertos, ha habido errores, creo que hay que corregir, hay que trabajar juntos, y no hay que regatear al gobierno (federal) por parte de las entidades federativas para que dén más y mayores resultados, lo que hay que dejar claro son las facultades que va a tener la guardia nacional y dejar claro las competencias de los tres órdenes de gobierno”.
Cuando se le pregunta que se invierten muchos recursos a nivel federal y a nivel estatal y todo ese dinero se ha ido al cesto de la basura?
Respondió: “Bueno ahí te voy a poner, un ejemplo, es un tema, esas son las cosas que hay que ajustar, nosotros somos el estado con la menor incidencia delictiva, y somos de los estados que menos recursos recibimos para esa materia, y tal pareciera que tienen que tener un relajo tu estado para que te den recursos, entonces a los que hacemos bien nuestra tarea, son a los que nos tienen que dar menos recursos. No”.
¿Gobernador, se quedaron sin población?
“Ese es otro tema, somos de los estados que tenemos poco más de 900 mil habitantes, y con el cierre de instalaciones petroleras iba a saltar la inseguridad. Hubo una gran crisis con la pérdida de más de 30 mil empleos por el tema la crisis petrolera, pero estamos trabajando, fortaleciendo el tema turístico, en el campo”.
¿Y no se les disparo la inseguridad, gobernador?
“Al contario somos el estado más seguro del país, pero no solo hubo proyectos, sino estrategia para combatir el tema de la delincuencia. Estamos trabajando fuerte, a darle duro”.
Po su parte, gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez aseguró que en materia de seguridad pública, “ha fallado todo, los gobiernos, el sistema judicial, han fallado ministerios públicos, ha fallado la sociedad misma que ha permitido que se incube la violencia como una norma, en fin es un reto enorme y responsabilidad todos para encontrar una solución integral al problema”.
En entrevista, se le preguntó si es cuestión de dinero gobernador el problema de seguridad.
–Es un asunto multifactorial que tiene que ver con la insuficiencia presupuestaria, tiene que ver con corrupción, infiltración de la delincuencia en las corporaciones policiacas, tiene qué ver con la pobreza, y es un asunto que tiene qué ve con muchos factores, no se puede ver como un tema asilado y de una solución sencilla.
Dijo que han fracasado todas las políticas en la materia.
¿Y de quién es la culpa?
–La culpa es de todos. Hoy tenemos una responsabilidad y que las cosas no han funcionado y que tenemos que ocuparnos con una visión distinta y asumir la parte de responsabilidad que nos toca.
Antes de terminar la charla, se le cuestiona que como que ya se cansó el pueblo de batallar con esa materia, y contestó:
“En lo personal siempre he creído que los gobernantes también somos ciudadanos y voy a hacer todo lo posible para que todo esto cambie”.