La Movilidad en los Tiempos de la Post-Reforma

Las condiciones de oferta de servicios móviles durante el periodo post-Reforma de Telecomunicaciones han favorecido la accesibilidad y consumo de estos entre la población mexicana.
Las actuales condiciones de precios más bajos, mejor cobertura, mayor velocidad de descarga, menor latencia en la transmisión de datos, alta calidad de las llamadas y una provisión eficiente de servicios, son las características identificables por los consumidores desde hace algunos años.
Penetración y Cobertura
Por convención de organismos internacionales como la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), así como por las autoridades bursátiles internacionales como las bolsas de valores, la penetración de servicios de telecomunicaciones se define como el cociente del número de líneas activas entre la población total de un país o región (todas las edades, segmentos socioeconómicos, ubicación geográfica, etc.).
Con base en este criterio y bajo las condiciones antes descritas, en México la penetración o teledensidad de servicios móviles ha seguido una trayectoria ascendente para ubicarse en 95.1% de la población, con un total de 119.5 millones de líneas al tercer trimestre de 2018. En perspectiva de tiempo, este coeficiente es 4.2 puntos porcentuales (pp.) superior a aquel alcanzado un año atrás y 8.9 pp. mayor al correspondiente tres años atrás.
Para fines de identificación de oportunidad comercial o de mercado, las áreas de mercadotecnia, finanzas y desarrollo de infraestructura de los operadores de telecomunicaciones pueden emplear esa cifra de 119.5 millones de líneas (95.1% teledensidad móvil) como aquel mercado asequible que genera demanda por capacidad de tráfico de voz y datos móviles.
Sin embargo, una ilustración fiel del mercado potencial, resulta de ajustar el coeficiente de penetración considerando a aquellos usuarios que poseen o usan dos o más líneas. Así, 6% de las líneas equivalente a 7.2 millones, resulta en una penetración efectiva de 89.4%, es decir, restaría llevar servicios móviles a 1 de cada 10 mexicanos.^[1]

Penetración de Servicios Móviles
(Porcentaje de Líneas entre la Población, %)

Esta trayectoria de precios se refleja en el gasto promedio destinado en el consumo de servicios móviles, medido por el ingreso promedio por usuario de los operadores (ARPU por sus siglas en inglés). La disminución de precios, especialmente en el segmento de prepago, se ha traducido en un nivel de gasto/ARPU promedio del mercado de $128.6 pesos mensuales, alcanzado al cierre del tercer trimestre de 2018, esto representa una caída anual de 4.0%.
Estos indicadores dan muestra de las mejores condiciones de asequibilidad que registran las telecomunicaciones móviles.
Consumo de Servicios
La asequibilidad, el desarrollo tecnológico y la consecuente mejor calidad en la provisión de servicios móviles ha resultado en la salida del escenario de contención en su consumo, para convertirse en una multiplicación en la generación de llamadas, pero sobre todo de MB de datos utilizados.
Consumo Promedio de Servicios Móviles por Usuario

En los últimos dos años, la oferta de minutos ilimitados en llamadas nacionales e incluso internacionales se tradujo en un aumento de 61.8% en los minutos promedio generados por un usuario, al pasar de 267 en el 1T-2016 a 432 durante el 3T-2018. Mientras que el consumo de datos se multiplicó 3.4 veces, al alcanzar un promedio de 1,290 MB por usuario al final de este periodo.
Estas métricas de movilidad manifiestan los avances alcanzados en torno a la disponibilidad, accesibilidad y consumo de los servicios entre la población. Como tal constituyen la materialización de esfuerzos del mercado, la política pública y regulatoria para aproximarnos a un entorno de conectividad móvil pleno para todos los mexicanos.

Es importante seguir generando mediciones eficientes de adopción y uso, en esta época de coexistencia de generaciones tecnológicas (3G, 4G y próximamente, 5G) que den cuenta de la evolución de las condiciones de mercado.
[1] Mediciones alternativas de la penetración de conectividad pueden ser construidas o ajustadas por aquella población que no cuenta con cobertura, los menores de 12 años, o bien por aquellas personas que presentan alguna discapacidad física que les impida hacer uso de los servicios móviles. Por esta razón, las mediciones oficiales se apegan a criterios o convenciones internacionales.