Ciudad de México, México.– Consultar en una biblioteca el conocimiento generado tiempo atrás es una experiencia insustituible para las nuevas generaciones, y trascendental en la formación de estudiantes, consideró José Sarukhán Kermez, exrector de la UNAM.
“Todo lo que hemos hecho se basa en la evolución del cerebro y la comunicación. Compartir la información, primero oral, luego escrita, transmitir las experiencias a las nuevas generaciones… ésa es la base del funcionamiento de las bibliotecas”, consideró.
Estamos en el inicio de nuevos tiempos, en los que grandes universidades ponen en línea sus colecciones bibliográficas o sus mejores cursos, pero la experiencia que marca a un joven es su estancia en el recinto, en una biblioteca, expuso al participar en la Décimo Sexta edición de la Conferencia Internacional sobre Bibliotecas Universitarias.
El investigador emérito del Instituto de Ecología indicó que estudiar en comunidad es insustituible, por lo que la visita a una biblioteca es central para el desarrollo de la gente. “Ustedes (los bibliotecarios) tienen un papel toral en la formación de los estudiantes”, dijo ante expertos reunidos en el auditorio Alfonso Caso.
En la conferencia “El significado de la Institución Bibliotecaria en la formación de nuevas generaciones de profesionistas y en la investigación”, el coordinador nacional de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) recordó que en su época de estudiante una de las instalaciones que más lo impactó fue la biblioteca de la Facultad de Ciencias, que hacía poco había sido trasladada a Ciudad Universitaria.
Por ello, lamentó que durante mucho tiempo el papel de estos recintos haya sido menospreciado, por lo que exhortó a trabajar para que las nuevas generaciones asistan a las bibliotecas y compartan sus ideas.
“Ojalá lleguemos al tiempo en que jóvenes y maestros discutan en los ambientes bibliotecarios sobre alguna nueva obra o algún tema, sin inhibiciones”, subrayó.
Adolfo Rodríguez Gallardo, del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información, además de uno de los más importantes promotores de libros de la UNAM, acompañó a Sarukhán Kermez, de quien destacó el decidido apoyo al acervo bibliotecario durante su rectorado. “Ejemplo de ello es que el presupuesto para la compra de libros se incrementó en 250 por ciento”.
Además, prosiguió, se creó el reglamento bibliotecario y se impulsó la modernización de las bibliotecas existentes y la construcción de un albergue digno para los incunables que resguarda la Biblioteca Nacional de México.
Finalmente, Elsa Ramírez, titular de la Dirección General de Bibliotecas, destacó el impulso de Sarukhán a la edificación de ocho nuevas bibliotecas y a la promoción del posgrado en Biblioteconomía.