Inteligencia Competitiva
Santiago Piedras
La forma de jugar ha evolucionado. Previo al surgimiento de la presente generación de smartphones, con funciones que han incrementado en el transcurso de los años, una persona habría requerido dispositivos diferentes para enviar mensajes, hablar con conocidos, escuchar música, navegar por internet, tomar fotos, jugar un videojuego y una infinidad de actividades adicionales que hoy en día se han vuelto posibles en un solo dispositivo.
Hoy en día, los smartphones son el segmento de videojuegos con mayor número de usuarios en el país. El segmento de videojuegos móviles, que anteriormente sólo se trataba de aquellos “de bolsillo” como snake, tetris y trivia, en menos de 20 años ha sobrepasado de forma abundante a las consolas fijas de videojuegos, que habían monopolizado el mercado en el pasado.
Concretamente, en la primera mitad del 2018 contabilizan 46.7 millones de usuarios que utilizan su smartphone para jugar en México, alcanzan un proporción de 68.3% entre el total de 68.4 millones de jugadores, equivalente a un crecimiento de 14.8% año con año.
Sin embargo, esto no quiere decir que la mayor proporción de los ingresos de la industria de los videojuegos corresponda al segmento de los smartphones. Al finalizar 2017, 85.9% de los ingresos por dispositivo provienen de consolas fijas y portátiles (hardware y software), mientras que solamente 8.2% de dichas ganancias provienen de aplicaciones de dispositivos móviles, el restante 5.9% de juegos en computadora, en estos últimos sólo se contabiliza el gasto realizado en software.
Acceso a Videojuegos por Dispositivo
(Proporción de Videojugadores, %)
Fuente: The Competitive Intelligence Unit
Esto significa que las consolas generaron ingresos por $21,303 millones de pesos en la industria de los videojuegos, frente a los $2,031 millones de pesos generados por aplicaciones móviles. Esta brecha se explica por el amplio diferencial en el gasto promedio en videojuegos, pues mientras los jugadores de consola invierten en promedio $312.5 pesos cada vez que adquieren un juego, sólo 5.7% de los gamers móviles pagan por descargar juegos y destinan en promedio $55 pesos.
Aunque es manifiesto que los smartphones no equiparan su nivel de ganancias al de las consolas en la industria, actualmente se ostentan como el segmento con mayor crecimiento. Tal que en 2017, este último alcanzó un crecimiento de 15.8%, frente a 7.1% de aquel de consolas.
Adicionalmente, los smartphones han sido el medio de acceso a los videojuegos para segmentos de la población que antes no se consideraban videojugadores, como individuos mayores de 50 años o personas en niveles socioeconómicos bajos.
De esta forma, el dinamismo de la industria de los videojuegos seguirá creando oportunidades de desarrollo en la industria. Lejos de ser una moda pasajera, los videojuegos son un fenómeno que se hace cada vez más presente en nuestro país desde los dispositivos móviles.