Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Todo se decidirá a las 11 en el salón de un hotel de la Roma. No se espera la asistencia de los 191 diputados federales lopezobradoristas porque todos tienen boleto de avión para mañana martes, y cualquier cambio se les cargaría a su bolsa.
Cómo sea, a esa contienda se presentarán al menos 6 pesos pesados morenistas. A saber:
- Dolores Padierna, quien acude a la pelea con el peor de los activos en contra: el de no poder deshacerse de su marido René Bejarano con quien AMLO no quiere que se le ligue en lo más mínimo
- Otro es el vetusto exlíder del PRD, el oportunista Pablo Gómez;
- Uno más es Alfonso Ramírez Cuellar;
- De bajo perfil pero gran influencia es Horacio Duarte;
- El favorito por su gran cercanía con Marcelo Ebrard es el aún senador Mario Delgado.
- Y de última hora entra en esa arena Tatiana Clouthier quien decidió rechazar el ofrecimiento de AMLO para ser subsecretaria de Gobernación y quedarse mejor en San Lázaro.
Experimentado en contiendas internas pero sobre todo en medios, el senador Delgado -exsecretario de Finanzas y de Educación en la administración de Ebrard en la CDMX antes DF, excontendiente del ahora senador electo Miguel Ángel Mancera por la Jefatura de Gobierno-, ha desplegado un intenso cabildeo personal, cara a cara y por whatsapp y otras redes sociales, entre los nuevos diputados.
Cuenta que haya sido uno de los primeros defensores desde el Senado de Andrés Manuel López Obrador y que se haya batido a fondo en defensa de Ebrard cuando fue acusado por los desfalcos y mala planeación de la línea 12.
Pegada a los talones de Delgado llega la senadora Padierna, quien afirma tiene ya el apoyo del 65% de los nuevos diputados de Morena, pero que no puede deshacerse de su marido de quien AMLO no quiere saber nada. Eso puede ser el factor que le impida llegar a la ansiada coordinación.
De último momento le entra a la pelea Tatiana quien fue la coordinadora formal de la campaña presidencial de López Obrador y una muy buena operadora de medios sobre todo en los debates con los coordinadores de los otros candidatos.
Quienes quizá no tienen ninguna oportunidad son el viejito Pablo Gómez, Horacio Duarte y Ramírez Cuellar a menos que López Obrador decida finalmente irse por un tercero a quien pueda controlar sin límites.
La contienda es nada más y nada menos que por el control de una bancada de 191 diputados que junto con la de sus aliados del PES (56) y PT (61) llegará a los 308 legisladores, es decir, con mayoría simple para reformas no constitucionales y a 26 senadores de distancia para aprobar reformas constitucionales.
Un elemento esencial es que quien llegue dominará un escenario donde por primera vez podrá haber reelección.
En este contexto el senador saliente y diputado federal entrante Mario Delgado presume de tener el mejor de los perfiles y una muy buena relación con las otras bancadas y sus posibles coordinadores.
Por lo pronto Delgado debe ser electo hoy coordinador. Y una buena parte de sus compañeros de viaje legislativo exigen ahora que la elección del coordinador sea, ya sabrá usted, democrática.
Es decir, que no sea a mano alzada sino con voto libre, directo y secreto.
Y no pocos afirman que Delgado ha intentado ganar su voto con promesas de favores, o atosigándolos con mensajes por whatsapp.
Así las cosas para este lunes entre los diputados de Morena.
Y PORFIRIO A LA PRESIDENCIA
En este mismo encuentro legislativod e Morena, los diputados deberán aprobar el la propuesta surgida desde el mismo AMLO, para que entrando el primero de septiembre Porfirio Muñoz Ledo sea designado presidente de la Cámara de Diputados.
Eso le permitiría ser quien entregue la banda presidencial a Andrés Manuel López Obrador.
MARTI LE GANA UNA A AMLO
La obviedad indicaba que Andrés Manuel López Obrador quería que el presidente del Senado fuese el michoacano cardenista Cristóbal Arias.
Eso al menos quedó en evidencia durante el encuentro de hace una semana entre AMLO y los senadores electos en un hotel de Calzada de Tlalpan donde sentó a su lado derecho a Ricardo Monreal y a su lado izquierdo a Arias.
A Martí Batres lo sentaron a tres lugares a la derecha del presidente electo, a un lado de la ministra Olga Sánchez Cordero, futura secretaria de Gobernación.
Pero algo hizo Batres que a fines de la semana Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena a petición expresa de AMLO, anunció finalmente que el presidente del Senado será Martí, luego de que Arias declinó participar.
En los hechos Batres no le gana la presidencia del Senado a Arias, sino a López Obrador.
Orale!!!
OTRA QUE SE PINTA SOLA
Pero la anterior no es la única derrota infringida a tabasqueño por uno de los suyos, sino que la otra que tomó distancia de él fue Tatiana Clouthier quien el fin de la semana le tiró a la basura la subsecretaría de Gobernación que le había ofrecido.
Enojada con su jefe desde la designación del senador saliente Manuel Bartlett como director de la CFE, Tatiana Clouthier finalmente decidió quedarse como una simple diputada más de Morena en San Lázaro, antes que ir al lado de Olga Sánchez Cordero en Gobernación.
El reemplazo de Tatiana en Gobernación será Diana Álvarez Maury. Licenciada en Derecho por el ITAM y ex asesora del Consejo General del Instituto Federal Electoral en las elecciones de 1994.
ANAYA SIGUE EN CONTROL DEL PAN
Dentro de un perfecto aunque antidemocrático guion partidario, en un madruguete sabatino, los gerentes de Ricardo Anaya en el PAN, ejecutaron de un solo golpe el cambio en la presidencia e Acción Nacional en favor de Marcelo Torres Cofiño, quien se sentó en el cargo sólo para de inmediato designar a su antecesor Demián Zepeda como coordinador de los próximos 23 senadores blanquiazules y de paso designar al senador saliente y diputado entrante Juan Carlos Romero Hicks como coordinador de los 81 nuevos diputados federales panistas.
El golpe se inició con la petición de licencia de Zepeda a la presidencia del PAN, para que Torres Cofiño, quien ocupaba la secretaría general del CEN panista, subiera por prelación la presidencia de ese partido. Todo fríamente calculado.
Zepeda -por si Usted no lo recuerda-, era presidente el PAN en suplencia de Ricardo Anaya quien pidió licencia para ser el candidato del Frente del PAN, PRD y MC a la Presidencia de la República.
Claridoso, el senador saliente Roberto Gil Zuarth dijo que todo eso: “Fue un auténtico sabadazo”.
Hoy sólo les queda pendiente a ese grupo lograr que Marko Cortes sea electo nuevo presidente del PAN. Todo entonces quedaría en “familia” con Anaya controlando todo desde las sombras.
Ni El Príncipe de Maquiavelo.