Ciudad de México, México.— Es urgente atender inundaciones que causan desastres, endurecer los procesos de construcción por sismos, atacar pobreza relacionada con asentamientos irregulares, contaminación, inseguridad y falta de planeación en la delegación Tlalpan, revela el Atlas de Peligros y Riesgos de la delegación Tlalpan”.
La información aclara que hay asentamientos irregulares de personas de clase media y alta “ya comenzaron a subir a las zonas verdes, porque el suelo de conservación es muy bonito”.
Un diagnóstico completo de las condiciones naturales y poblacionales de Tlalpan, al sur de la capital mexicana, fue elaborado desde noviembre de 2017 por un grupo formado por expertos de la UNAM y funcionarios de esa demarcación.
Coordinado por Clemencia Santos Cerquera, académica del Instituto de Geografía (IGg) de esta casa de estudios, el “Atlas de peligros y riesgos de la delegación Tlalpan”, que reúne estadísticas y mapas específicos, fue presentado ayer en el auditorio del edificio anexo de la entidad universitaria.
Será funcional “para la toma de decisiones, para la gestión de riesgo y para ordenamiento urbano de la delegación, que próximamente será alcaldía”, comentó Santos, ingeniera catastral y doctora en geografía.
Incluye mil páginas de análisis escritos y cerca de 250 mapas de temas específicos. Algunos se refieren a eventos naturales como sismos, inundaciones y el posible nacimiento de un volcán en la zona; mientras que otros abordan problemáticas sociales como pobreza, inseguridad, vialidad y asentamientos humanos irregulares.
Santos Cerquera dijo que desde noviembre de 2017 el trabajo ha sido intensivo, detallado y con todos los datos georreferenciados.
Los expertos de la UNAM hicieron presentaciones con grupos de trabajo de la delegación y lograron una detección de los principales problemas del área.
Inundaciones y sismos
La universitaria detalló que los problemas de Tlalpan se dividen según el tipo de riesgo. “Con urgencia se tienen que atender las inundaciones, porque causan desastres y generan arrastres de la zona de suelo de conservación, hacia áreas más bajas. El agua que corre tapa las alcantarillas y tira las bardas. Las inundaciones tienen que ver con la parte ambiental y con las acciones humanas sobre la zona de conservación”.
Otro punto delicado que detectó el Atlas son las partes sísmicas. “Se deben definir muy bien y endurecer los procesos de construcción”.
Propuso implementar un método de resonancia de los edificios, que permita detectar su condición. “A medida que las frecuencias del sismo se junten con las frecuencias del inmueble, éste será menos tolerante a un temblor”, explicó.
Pobreza y asentamientos irregulares
Además, resaltó, se debe atacar la pobreza, relacionada con asentamientos irregulares, contaminación, inseguridad y falta de planeación en algunas zonas.
“Aunque hay muchos asentamientos irregulares, no todos son de gente pobre. Debido a que el suelo de conservación es muy bonito, tiene vialidades y se conecta, personas de clase media y alta ya comenzaron a subir a las zonas verdes”, acusó.
La académica universitaria concluyó que el “Atlas de peligros y riesgos de la delegación Tlalpan” es el primer esfuerzo de esta envergadura, con tantas variables y cruces de información.
