Ciudad de México, México.– Conocer a detalle el funcionamiento de una aeronave militar Bell V-22 Osprey fue el objetivo de estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) al construir un prototipo didáctico a escala para realizar mejores prácticas y afirmar los conocimientos adquiridos en el aula.
El Beacon V-22, construido en el Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (CECyT) 7 “Cuauhtémoc”, por estudiantes de la especialidad en Aeronáutica, es un convertiplano que combina las características de una aeronave de ala fija con una de aspas rotativas que le permite despegar y aterrizar en vertical, mantener un vuelo estacionario o desplazarse de manera horizontal.
Saúl Álvarez Bárcenas, Carlos Duarte Salinas, Yoali García Herrera y Barush Hernández Mohar encabezaron el desarrollo del Proyecto Aula de su grupo, que consistía en la construcción de una aeronave de ala rotativa, sin embargo, los jóvenes decidieron colocar sensores en cada uno de los principales sistemas y controles de vuelo e instalaron sistemas electrónicos mediante el sistema de vuelo por cable (fly by wire) para que su maqueta se convirtiera en un simulador real.
El prototipo, hecho con un material ligero pero resistente, cuenta con un módulo bluetooth que se conecta a un dispositivo electrónico, lo que permite accionar los motores derecho e izquierdo, despegar en vertical o mantener el vuelo estacionario, también se puede abrir o cerrar la compuerta trasera que es donde normalmente se hace la carga de implementos o la entrada y salida de los soldados.
Asesorados por el profesor Francisco García Reyes, los estudiantes politécnicos aplicaron sus habilidades y conocimientos en la construcción de esta maqueta al aplicar las materias que han visto hasta cuarto semestre como son electrónica y electricidad, estructuras, sistemas y programación.
“La idea era contar con un prototipo que pudiera representar físicamente lo que hace un avión con ala rotatoria, porque en la escuela sólo tenemos uno de ala fija y es importante para nosotros tener la mayor cantidad de conocimientos y una visión más clara de los artefactos aéreos que se producen en la actualidad”, manifestaron.
Los jóvenes consideraron que este modelo a escala les será de gran utilidad en la especialidad, ya que podrán complementar de manera práctica algunas lecciones teóricas, además buscan sembrar el interés por desarrollar este tipo de maquetas interactivas para otros tipos de aviones o drones que se utilizan hoy en día. “Entonces el conocimiento también quedaría reflejado materialmente en un prototipo funcional y apoyaría con clases prácticas”, detallaron.
Los estudiantes del IPN externaron que es importante impulsar este tipo de prácticas entre los alumnos de aeronáutica porque en el país existe un gran retraso en una incipiente industria de aviones cuando lo ideal sería contar, no sólo con mano de obra calificada para la reparación y ensamble de piezas, sino también para construir y elaborar manuales de acuerdo con las características propias de nuestro país.