Ciudad de México, México.— El gasto federal en la educación obligatoria, equivalente al 2.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), resulta insuficiente para atender el rezago existente y el mantenimiento de los inmuebles, aseguró el consejero presidente del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Eduardo Backhoff Escudero.
Backhoff Escudero, señaló que se debe mejorar la distribución de esos recursos, de tal manera que favorezcan a las escuelas que atienden a las poblaciones vulnerables, especialmente las pobres, rurales e indígenas, ya que la pobreza es uno de los principales factores que impacta negativamente en el aprendizaje de los estudiantes.
El funcionario acudió a la Cámara de Diputados a entregar el documento “La educación obligatoria en México. Informe 2018” a los integrantes de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos, que preside la diputada Hortensia Aragón Castillo (PRD).
“Las condiciones sociales y educativas del país se traducen en niveles insatisfactorios de aprendizaje y en una oferta escolar muy inequitativa, lo que impide romper el círculo de la pobreza. Los niños pobres van a escuelas pobres y obtienen resultados pobres”, externó.
“No basta con igualar por alumno la cantidad de recursos que se da, sino hay que darle más a los alumnos que más lo necesitan, sino no vamos a salir de este círculo”, agregó.
El consejero apuntó que los grupos con mayores dificultades para asistir a la escuela “son aquellos que tienen algún tipo de discapacidad, son pobres o vulnerables por ingresos o por carencias, son hablantes de una lengua indígena, viven en localidades con alto grado de marginación y niños y jóvenes que trabajan jornadas extensas”.
Refirió que los estados del país con menor tasa de asistencia a las escuelas son: en nivel primaria, Chihuahua, Chiapas y Oaxaca; en secundaria, Chiapas y Michoacán, y en educación media superior, Michoacán, Chiapas, Guanajuato y Oaxaca.
Sobre el abandono escolar, afirmó que ha disminuido a lo largo de los años, y detalló que cerca de 1.1 millones de alumnos dejaron la escuela en el ciclo 2015-2016, de los cuales 770 mil fueron de educación media superior.
Comentó que entre las principales causas que lo provocan están las económicas, las académicas y la poca relevancia de la enseñanza.
Backhoff Escudero sostuvo que en la actual administración ha habido un incremento sustancial de los recursos invertidos, “la Secretaría de Educación Pública (SEP) construyó y habilitó espacios educativos, pero no invirtió en su mantenimiento”.
También enfatizó que los diversos programas y fondos que atienden la infraestructura educativa “no están bien articulados”.
Dijo que hay escuelas que no disponen de espacios básicos como biblioteca o aula; en el caso del salón de cómputo e Internet, se carece de estos elementos en el 84 por ciento de los centros preescolares, en 69 por ciento de las primarias, en 57 por ciento de las secundarias y en 39 por ciento de los de educación media superior.
Comentó que hay carencias de sanitarios en 11 por ciento de los planteles preescolares, en 9.0 por ciento de las primarias, en 6.0 por ciento de las secundarias y en 3.0 por ciento de los de educación media superior.
Refirió que el gasto para posgrado se redujo y también el destinado a la educación para adultos, “a pesar de la magnitud de la población mayor de 15 años que no ha concluido su educación básica”.
El consejero presidente también proyectó que al país le tomará casi tres décadas, para que el promedio de escolaridad de los mexicanos sea equivalente al de preparatoria o bachillerato, de seguir con la tendencia de aumentar 1.2 grados cada 10 años que se registra desde 1960.
Señaló que en 1960 la escolaridad promedio de la población mexicana era de 2.5 grados y pasó a 9.5 grados en 2015, que representan un poco más que la educación secundaria, y en donde las mujeres se sitúan por debajo de los hombres.
Backhoff Escudero resaltó que, derivado de la reforma educativa de 2012-2013, se logró ordenar los procesos de ingreso, promoción y permanencia de los docentes, todo ello centrado en los méritos de éstos.
Indicó que un estudio del Banco Mundial señala que los docentes que están llagando a las aulas, a partir de las evaluaciones, “son, sin duda, los mejores a juzgar por sus conocimientos curriculares, disciplinares y didácticos”.
Apuntó que más de 34 mil docentes han sido promovidos, pero hay algunos profesores que no cumplen con los requisitos para ello. Por ejemplo, en el caso de los docentes indígenas, dos terceras partes no cuentan con título de licenciatura.
El funcionario del INEE manifestó que entre los desafíos de sistema educativo están: que no ha permeado por completo la idea de ingresar y promoverse por concurso; las resistencias a la evaluación de desempeño; la transparencia total en la apertura de vacantes a concurso, y la formación inicial y continua de los profesores.
También figuran la mejora de la infraestructura, equipamiento, acceso a Internet y acervos bibliográficos de los centros escolares, especialmente los indígenas y rurales.
“En materia de inclusión, equidad y atención a la diversidad queda mucho por hacer”, destacó.
Trabajar en la transparencia del gasto educativo que destinan las entidades federativas sigue siendo un pendiente, porque la información se mantiene “poco confiable”, agregó.
Backhoff Escudero estuvo acompañado por los consejeros Sylvia Irene Schmelkes del Valle, Teresa Bracho González, Margarita Zorrilla Fierro y Gilberto Ramón Guevara Niebla, así como de diversos funcionarios de la institución que encabeza.
Durante la sesión del Pleno de este jueves, la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados informó que se recibió del INEE el informe 2018 “La educación obligatoria en México” y su reporte anual de gestión, que fueron turnados por el diputado presidente, Edgar Romo García, a la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos.
El documento “La educación obligatoria en México. Informe 2018”, que consta de ocho capítulos, anexos estadísticos y resultados, puede consultarse en la página www.inee.edu.mx.