Ciudad de México, México.– La construcción de una nueva embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México es un proyecto que refuerza la relación bilateral entre México y el país vecino, consideró el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, al asistir a la colocación de la primera piedra de dicha obra.
“Me parece que lo que está señalando esta obra hoy es la relación México-Estados Unidos, no debemos perderla de vista. Aquí estamos dejando constancia que se puede construir, es una señal de inversión, esta es una señal de confianza en México y nosotros por eso queremos encontrar reciprocidad en estas tareas”, subrayó.
La sede diplomática se edificará en un predio de 3.4 hectáreas en la colonia Irrigación, de la delegación Miguel Hidalgo, y se caracterizará por su construcción y diseño sustentable, amigable con el entorno.
“Se ha manejado con mucho cuidado, se ha trabajado con todas las áreas tanto federales como locales para tener absolutamente toda la normatividad, y como lo dijo la embajadora, un proyecto sustentable. Debe ser una buena noticia para los vecinos en materia de seguridad, de desarrollo”, puntualizó el mandatario capitalino.
Sostuvo que la obra atraerá inversiones en el transcurso de su construcción, y refrendó el acompañamiento de las autoridades locales a fin de que “se vaya cumpliendo con todos los pasos necesarios para que sea una buena noticia”.
El jefe de gobierno acompañó a la embajadora de Estados Unidos en México, Roberta Jacobson, en el evento donde también se dieron cita el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida; el subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte, Carlos Manuel Sada Solana; la jefa delegacional, Xóchitl Gálvez; así como funcionarios estadounidenses y representantes de la constructora Caddell Construction Company, de Montgomery, Alabama.
Para la nueva embajada se tiene estimada una inversión de 943 millones de dólares, se prevé que esté concluida en el año 2022 y que se contrate a 2 mil 500 empleados, de los cuales alrededor de mil 200 serán mexicanos.
La embajadora, Roberta Jacobson, destacó que desde la instalación de la sede diplomática de su país en México, en 1928, quedó de manifiesto el testimonio de la importancia de la fuerte relación entre ambas naciones.
La construcción de la nueva embajada, dijo, será segura, moderna y ambientalmente sustentable, con sistemas de captación pluvial, así como mecanismos para ahorro de energía y para reutilizar agua.