¡Con ese cabrón, ni a la esquina!

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Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

El mensaje verbal y corporal lo dicen todo de Ernesto Cordero respecto de Ricardo Anaya.

La respuesta del presidente del Senado es instintiva. No oculta, ni pretende hacerlo, su anidmarversión por el expresidente de su partido.

La pregunta había sido de si en el hipotético caso de que Anaya ganara la Presidencia de la República él se iría a trabajar a su gabinete.

De Ricardo Anaya dice que simplemente ha pasado por sobre todas las formas de civilidad poítica. Le reprocha prácticamente todo lo que es. Afirma que la más reciente violación a esa civilidad fue el haber llevado a su registro como aspirante presidencial a 11 gobernadores y a toda la estructura de Acción Nacional.

–       A ver, ¿ahora quien se va a atrever a registrarse para competirle la candidatura del Frente?, ¿Juan Carlos Romero HicksRafael Moreno ValleLuis Ernesto Derbez o Ernesto Ruffo? ¡Ya les echó montón, la cargada está con él!

Cordero hizo ayer su primera parada en la mesa de algunos columnistas que fuimos invitados para una comida de fin de año con él y algunos miembros de la mesa directiva de la cámara alta.

Ahí llegó también la presidenta de la Junta de Coordinación Política, la mexiquense Ana Lilia Herrera y Lorena Cuellar, senadora del PT-Morena por Tlaxcala.

Confrontado con las mismas interrogantes, presentadas con diferentes matices por los columnistas, Cordero recupera distancia y, sonriente, se niega a confirmar que votará por su amigo y subalterno en Hacienda, el ahora candidato del PRI y del PVEM José Antonio Meade.

Pero su actitud advierte que lo hará de cualquier forma. Mede es su candidato.El, Cordero, fue quien acercó al entonces secretario de Hacienda Meade a los gobernadores del PAN durante la pasada negociación de los Presupuestos de Ingresos y Egresos. Ahí, en corto, todos ellos establecieron acuerdos.

Su voto por Meade será apenas un paso más de esa relación.

A la pregunta de si gana Mede se irá a trabajar con él, Cordero dice que no.

Y ante la interrogante de, cuál entonces será su destino una vez en que, a fines de agosto próximo, deje el Senado, Cordero afirma que se irá a la vida priada, a dar cátedrá.

Mala excusa para quien es tan cercano al candidato con mayores posibilidades de ganar la presidencia el 1 de julio de 2018 a pesar de que otros muchos digan que perderá.

Sí como no. De seguro Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray, y todo el poder y recursos que representan de dentro y fuera del país están pintados.

En coincidencia conmigo, mi compadre Rivera comenta que lo que ocurre es que, a pesar de haberlo tenido enfrente diurante ya casi 12 años (6 en el edomes y otros en Los Pinos), pocos conocen en realidad a Peña Nieto.

“Es verdaderamente desalmado, frío, y muy habilidoso… va a acudir a todo para garantizarle el triunfo a Meade”.

Cordero advierte que el Frente convertido en alianza electoral que postular a Anaya es un  mecanismo hueco. Sin sustento real entre los simpatizantes panistas.

Coincide con el senador independiente Alejandro Encinas respecto de que un simpatizante blanquiazul –no militante panista, “esos son de Anaya”-, no va a votar ni por Anaya ni por los candidatos perredistas o del Movimiento Ciudadano.

Esos millones de abajo, no van a votar ni por unos ni por los otros, asegura.

La algarabía y bravuconadas de Anaya en su registro, se van a estrellar con su oscuro fondo patrimonial. Cordero recuerda que Anaya no sólo lo persigue su proclividad a la traición y el agandalle, sino la corrupción.

Rescata aquel incidente que vivió el queretano cuando llegó como coordinador de los diputados federles de Acción Nacional. No sólo fue quien propició los moches, sino que desapareció varios millones de pesos de las prerrogativas que le dan las cámaras a los coordinadores parlamentarios para apoyar tareas de sus legisladores.

Ese dinero nunca se recuperó, afirma Cordero.

¡QUE LO INTENTE!

Interrogado sobre si teme que lo puedan expulsar del PAN junto a los otros 4 senadores rebeldes del PAN –Roberto Gil ZuarthJavier LozanoSalvador Vega Casillas y Jorge Lavalle-, Cordero reta:

¡Que lo intenten!

Sería, dice, un absurdo que pretendieran correrlo por defender los principios de su partido.

Cordero sabe que representa a una fuerte corriente interna en el PAN, que es la que podrìa impedirle a Anaya alcanzar la Presidencia de la República.

Esa corriente que está por expresarse, es la que podría llevar a Margarita Zavala a una posición de conrapeso electoral frente al queretano. No descarta para nada que la esposa del expresidente Felipe Calderón pueda llegar a rebasar a Anaya. Faltan 7 meses para la elección y en ese lapso van a pasar muchas cosas, advierte.

LEY DE SEGURIDAD INTERIOR, MAÑANA

Con Cordero en la mesa, no se podía dejar de preguntarle sobre el incierto destino de la tan cuestionada iniciativa de Ley de Seguridad Interior. Hoy al parecer detnida en el Senado.

Al respecto dice que todo podrìa quedar resuelto pasado mañana jueves.

Y a quienes piden más debates y más foros de expresión ciudadana  sobre esta iniciativa, entre ellos el presidente Enrique Peña Nieto,  Cordero les responde que el debate legislativo ya tiene 9 meses.

“Si la aprobamos el jueves no va a ser por fast-track, para nada, está ya muy discutida y analizada”, indica

EL ESTILO MEADE

Desde su destapeJosé Antonio Meade se mostró como un  personaje que no acuede a terceros para tramitar sus apoyos.

Prácticamente solo llegó a sus citas con los sectores del PRI y luego sin grandes aparatos se fue a comer en lugares públicos con sus excontendientes internos.

Igual se le vio manejando su auto para llegar a esos sitios o para mostrarse junto a Aurelio Nuño.

En una librería se le vio con el lider del Partido Nueva Alianza, Luis Castro Obregón y ayer igual acudió solo al encuentro de la dirigencia del Partido Verde.

Su estilo es claro: la alianza partidaria que lo lanzará a la Presidencia de la República es con él, no entre partidos, aunque la formalidad electoral requiera la firma de las dirigencias del PRI, PVEM y Panal.

¿Cómo operará eso na vez llegado a Los Pinos, si llega?

Ya lo veremos.

Por lo pronto cada uno de los partidos queda al margen de esa alianza. Interesante, ¿no?