Ciudad de México, México.– Bajo la batuta del maestro holandés Marjin Simons, la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional (OSIPN) ofreció una función interpretando a Ludwig van Beethoven con el concierto para piano número 5 en Mi bemol mayor “Emperador”, y a Sergei Prokofiev con la obra “Alexander Neversky”.
En esta ocasión acompañaron a la OSIPN el pianista mexicano Jorge Federico Osorio, considerado como uno de los mejores del mundo; la mezzosoprano María Luisa Tamez; los coros Alpha Nova del Instituto Politécnico Nacional y Promúsica, dirigido por Samuel Pascoe.
La pieza del compositor alemán “Emperador” es el último concierto para piano de Beethoven, que tiene que ver con la conquista de Napoleón Bonaparte a la ciudad de Viena, Austria. La composición del “Emperador” está ligada a otras construcciones del autor como sonata para piano “Los adioses” y “Arpa” para cuarteto de cuerdas.
Por su parte, la obra de Sergei Prokofiev “Alexander Neversky”, fue hecha para la banda musical de la película del mismo nombre del cineasta ruso Sergei Eisenstein. Combinación que creó dos obras maestras: musical y de cine.
Alexander Nevsky, príncipe de Növgorod (1220-1263), luchó contra suecos, teutones y tártaros, quienes amenazaban con invadir su pueblo. La intervención de los coros Alpha Nova y Promúsica simularon los cantos católicos de aquellos tiempos, pero con arreglo del maestro Sergei Prokofiev con la finalidad de expresar mejor la atmósfera requerida para los espectadores contemporáneos.
Una de las estrofas del canto dice: “Celebren a la madre Rusia que el enemigo no vivirá en estas tierras”. Obra cinematográfica y musical que subraya la grandeza del pueblo ruso. Alexander Nevsky fue canonizado en 1547 por la iglesia ortodoxa rusa y su festividad se celebra el 12 de septiembre.