Inteligencia Competitiva
Por Javier Medina A raíz de la expansión que ha tenido la industria de telefonía móvil en México, los usuarios ahora se benefician de una abundante oferta de dispositivos, de distintas gamas y cualidades técnicas/estéticas, que pueden adaptarse a la mayoría de los bolsillos. No obstante, la desaceleración en la dinámica de reemplazo (explicada en el análisis “Propensión de Reemplazo de Smartphones en México”) de equipos es uno de los factores que han marcado la pauta para incentivar el crecimiento del mercado secundario de Smartphones. Si bien existe un segmento del mercado que continúa optando por una dinámica de reemplazo a corto plazo, las condiciones macroeconómicas, socioeconómicas y de mercado han propiciado la búsqueda de nuevas alternativas para hacerse de un dispositivo que se adecúe a las necesidades tecnológicas actuales. Frente a una necesidad de ahorro, el usuario dispone de dos opciones: permanecer con el mismo dispositivo por más tiempo, pese al desgaste físico, o mirar hacia el mercado secundario de equipos inteligentes y adquirir un equipo reacondicionado o usado. A diferencia de un equipo usado, un teléfono reacondicionado es un equipo que ha atravesado un proceso de reparación donde le son reemplazadas piezas que puedan no estar funcionando correctamente y se restaura la estética del diseño original del dispositivo para que funcione y se vea como uno nuevo. El mercado secundario de teléfonos móviles inteligentes (reacondicionados) constituye ya una industria con un valor de más de mil millones de pesos anuales en el plazo de un año al tercer trimestre de 2017 (3T17). Entre el total de usuarios de Smartphones (96.9 millones de dispositivos activos), apenas 733 mil (0.8%) tienen un equipo reacondicionado al tercer trimestre de 2017 (3T17). Al respecto, cabe analizar el perfil de los potenciales consumidores de equipos reacondicionados, ya que es de esperarse que en el mediano plazo las menores facilidades de compra de equipos nuevos y el aumento en precios incentiven el consumo de estos equipos.
Entre los usuarios de teléfonos inteligentes, 25% está dispuesto a comprar un dispositivo reacondicionado. No obstante, esta disposición se encuentra sujeta a la reducción en el costo original del equipo. En este sentido, 54.5% de los usuarios consideran necesaria una reducción de mínimo mil pesos para adquirir un producto reacondicionado. Por otra parte, para atraer la atención de 89.5% de los usuarios, casi la totalidad del mercado potencial, la compra de esta clase de dispositivos se encuentra condicionada a un descuento de al menos $2,000 pesos.
Por otra parte, el gasto promedio en equipos reacondicionados es de $1,616.7 pesos. Si tomamos en cuenta que el gasto promedio pagado por un Smartphone nuevo es de poco más de 3 mil pesos, con un descuento aproximado de $1,000 pesos un vendedor de equipos reacondicionados estaría atrayendo a más de la mitad de los usuarios dispuestos a adquirir estos equipos con un precio aún por encima del promedio actual. No cabe duda sobre la importancia que el mercado secundario tendrá en la industria de smartphones en el mediano plazo. Si bien aún son escasos los tenedores que obtienen dispositivos a través de esta vía, esto se explica principalmente a la marcada desconocimiento sobre estos equipos, ya que apenas 8.7% de los usuarios de Smartphones ha escuchado hablar de ellos. Conforme se consolide una oferta adecuada de equipos reacondicionados profesionalmente, el mercado secundario jugará un papel cada vez más importante en la industria. A su vez, su crecimiento tomará impulso en la medida que los usuarios comiencen a considerar a esta clase de equipos como una alternativa de actualización y de adquisición de equipos de gama media o alta a precios asequibles, que a su vez no representen una deuda a dos años o más. |