Puebla, México.– La garantía de que las viviendas afectadas por los sismos de septiembre pasado se van a poner en pie son las “Mujeres Vigilantes” de la reconstrucción, afirmó la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Rosario Robles Berlanga.
Al encabezar la Toma de Protesta al Comité de “Mujeres Vigilantes”, la Titular de la SEDATU señaló que “el Presidente de la República Enrique Peña Nieto nos pidió que sean ustedes, las mujeres, y por eso les agradezco su trabajo voluntario que tenían un techo y que quieren saber que sus hijos estarán seguros en su nuevo hogar”.
De gira de trabajo por el municipio poblano, la Titular de la SEDATU afirmó que el objetivo es ratificar el compromiso del Gobierno de la República de respaldar el proceso de reconstrucción en las entidades afectadas por los sismos de septiembre pasado.
“Tenemos ocho estados de la República afectados; en materia de vivienda hay 180 mil viviendas afectadas, de estas 50 mil las vamos a reconstruir y por eso es que se hizo un censo casa por casa para apoyar a quienes en realidad resultaron afectados, y que nadie lucre políticamente con la tragedia de los mexicanos”, afirmó
Acompañada por el gobernador del estado de Puebla, Antonio Gali Fayad; funcionarios federales, estatales y municipales, además de habitantes de la comunidad, la Secretaria Rosario Robles informó que en el caso de Puebla, el censo arrojó más de 28 mil familias afectadas, y solamente en Tochimilco, de mil 400 familias.
“Este censo es gracias al trabajo que hicimos con el gobierno estatal y tenemos que ir al proceso de reconstrucción, y en los próximos días llegarán las tarjetas para que entre todos podamos levantar nuestras casas con un proceso de autoconstrucción con asistencia técnica”, afirmó.
Destacó que en esta nueva etapa es fundamental contar con el trabajo conjunto de todos, así como de una gran responsabilidad para garantizar que las nuevas viviendas sean seguras para quienes las habiten.
“Tenemos que aprender a saber que estaba mal para no volver a cometer errores porque estamos hablando del lugar donde viven nuestros hijos, por ello es fundamental la asistencia técnica que por cierto será gratuita”, señaló.
Por último, convocó a los poblanos a trabajar de la mano con los diversos niveles de gobierno para volver a la normalidad en las diversas comunidades afectadas por los sismos.
“Así como lo hicimos en los primeros días y entre todos nos abrazamos y apoyamos, ahora igual porque entre todos debemos poner en pie a nuestras comunidades porque hoy no hay colores ni distingos hay una sola causa que se llama México”, puntualizó.
En tanto, el gobernador Antonio Gali Fayad, resaltó el trabajo y esfuerzo de las mujeres de Tochimilco acompañado de los hombres y jóvenes para reconstruir al municipio, así como para realizar los trabajos en la escuela y la Iglesia de San Antonio de Padua.
En su oportunidad, el delegado de la SEDATU en Puebla, Juan Manuel López Arroyo, destacó la coordinación de los tres niveles de gobierno para apoyar a quienes resultaron afectados por el sismo.
Por su parte y a nombre de las mujeres que integran el Comité de “Mujeres Vigilantes”, se comprometió a estar muy pendiente para que los recursos sean direccionados a la reconstrucción de viviendas vayan a quienes lo necesitan.
Al término de la toma de protesta al Comité de las “Mujeres Vigilantes”, la Titular de la SEDATU encabezó una reunión de evaluación en donde escuchó los avances de cada una de las dependencias involucradas en la reconstrucción a partir de la emergencia registrada por el sismo del 19 de septiembre, en la que se destacaron los trabajos en materia de vivienda y la reactivación de la actividad económica.
Momentos antes, Rosario Robles realizó un recorrido al interior de la iglesia de San Antonio de Padua, la cual fue construida en Siglo XVI, y que se vio afectada durante el sismo del 19 de septiembre pasado.
Constató además los trabajos de demolición que se realizan en algunas viviendas, así como en las instalaciones de la Escuela Primaria Rural Federal “Ignacio Zaragoza”, que sufrió daños irreparables.
