Ciudad de México, México.– Caballos, burros y mulas que han apoyado en el trabajo de las brigadas en Juchitán, Oaxaca, localidad afectada por el sismo del pasado 7 de septiembre, son atendidos por integrantes de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM, del Programa Donkey Sanctuary-UNAM y de la organización World Horse Welfare.
Los équidos, en su mayoría caballos, son empleados en esta comunidad para guiar carretas que transportan basura, dijo Eduardo Santurtún Oliveros, académico de la entidad universitaria. Pero como sucede en muchas partes del mundo luego de un desastre, son utilizados durante el proceso de reconstrucción, y en el caso de Juchitán son auxiliares en la tarea de retiro de escombros y material de construcción.
La intención de los universitarios es diseñar estrategias para que la ayuda que se brinda tenga un impacto mayor, pero cuidando la sustentabilidad, el bienestar de los animales y la relación adecuada de éstos con las personas.
“A la fecha, hemos llevado a la localidad médicos veterinarios que han atendido a 554 caballos, mulas y burros por tener heridas anteriores al sismo, ocasionadas por el sistema de carga que se emplea”, explicó.
Los expertos han detectado un mal sistema de arneses para jalar las carretas, y ahora se busca trabajar con los propietarios para enseñarles la mejor manera de llevar a cabo esta labor. “Los équidos son empleados en la etapa de reconstrucción y queremos que se haga un buen manejo de ellos para que gocen de salud y bienestar”.
El también director interino regional de las Américas de la Donkey Sanctuary indicó que no sólo pretenden ayudar en las brigadas, sino lograr que el conocimiento compartido derive en proyectos sustentables, con impacto económico y social en las comunidades afectadas, porque los équidos no sólo brindan apoyo en estos momentos, también son indispensables en el trabajo cotidiano.
Desde 1984, cuando inició el Programa Donkey Sancuary-UNAM en la FMVZ, se labora en la atención y bienestar de équidos de trabajo, por lo que después de los sismos los universitarios se comunicaron con los coordinadores de los proyectos en Xochimilco, Puebla, Morelos, Ciudad de México y Oaxaca, a fin de evaluar qué tanto fueron afectados.
“No hubo muchos casos, pero detectamos que si bien los équidos no fueron dañados, sí son utilizados para formar parte de las brigadas, de ahí nuestro interés en que lo hagan en las mejores condiciones”, reiteró.
Finalmente, Santurtún Oliveros expuso que el Programa Donkey Sanctuary-UNAM se está restructurando para ampliar sus alcances a otras zonas del país y de América Latina, en donde los pobladores consideran a sus animales elementos importantes en su vida diaria, pues cumplen una función trascendental en la sociedad al auxiliar, por ejemplo, en la recolección de basura.