Ciudad de México, México.– La Cámara de Diputados debe rediseñar la propuesta presupuestal 2018 del presidente Enrique Peña Nieto para la niñez, ya que su proyecto en términos generales sólo aumenta en poco más del 3 por ciento respecto al 2017, lo que impacta negativamente en rubros como salud, educación, derechos humanos, atención a víctimas, prevención y persecución del delito, entre otros, indicó el diputado federal Rafael Hernández Soriano.
El también secretario de la Comisión de Derechos de la Niñez, alertó que con un bajo presupuesto para el 2018, la administración federal pone en riesgo los compromisos internacionales asumidos en la Alianza Global para poner fin a todo tipo de violencia contra niñas, niños y adolescentes.
Al momento de discutir el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), dijo, se debe visualizar la urgencia de contar con más Centros de Atención Social y dotarlos con recursos y personal capacitado, tener en cuenta el creciente fenómeno migratorio y la violencia ejercida hacia los menores de edad, reforzar la estrategia sanitaria para abatir problemas de obesidad, sobrepeso y diabetes, la relevancia de la educación temprana y la promoción de los derechos humanos de este segmento, entre otros.
Restringir y reducir recursos públicos para atender a la niñez de forma integral, aumenta su condición de vulnerabilidad y deja en falta al Estado, subrayó el legislador del PRD.
Preocupa, abundó, que en el apartado para protección y restitución de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, se proponga una reducción del 38 por ciento, lo que sólo es un ejemplo de que hay una estrategia oscilante en cuanto a las responsabilidades asumidas en la Alianza Global.
Hernández Soriano se pronunció por rediseñar la propuesta restrictiva del Ejecutivo Federal y evitar que la atención integral a la infancia retroceda por falta de recursos públicos.
“El presupuesto para atender a la niñez no debe ir a la baja ni con aumentos simbólicos, sino al alza permanente; son muchas las carencias y peligros a los que se expone a la infancia y el Estado, en su conjunto, debe prever estos riesgos”, añadió.
Reconoció que el país vive un escenario de crisis debido a las tragedias generadas por los sismos del 7 y 19 del pasado septiembre y a los fenómenos hidrometeorológicos de la actual temporada de huracanes, sin embargo, apuntó que el diseño de la propuesta del gobierno se hizo antes de estas tragedias, por lo que no se puede atribuir el escenario restrictivo a dichos eventos.
Por lo anterior, propuso legislar con sensibilidad al enmendar la página y anteponer los derechos supremos de la niñez al momento de discutir el PEF 2018.
“Los temas de la niñez nos unen a todos los legisladores, por lo que esperamos una reacción similar al momento de definir los recursos públicos para no agudizar más su frágil situación”, expuso.
“Debemos ser creativos para buscar ahorros en otros rubros del gasto público, sin descuidar la contingencia que vive el país”, agregó.
Respecto a la prevención y persecución del delito, expuso que a pesar de que México es el primer lugar mundial en donde se registran delitos de turismo sexual y trata de menores, a la Procuraduría General de la República se le disminuye en un 34 por ciento el presupuesto para atender múltiples rubros que afectan a la niñez, entre ellos, la promoción del respeto a los derechos humanos y la atención a víctimas del delito.
Hernández Soriano reiteró su convocatoria para que todas las fracciones parlamentarias logren un PEF que abarque recursos suficientes para atender y proteger a la niñez, y le den el lugar prioritario que ocupa en el discurso del gobierno federal.